Un paseo por Jalisco
La visita al Estado de Arturo Herrera, secretario de Hacienda, fue una gira de cortesía más que una oportunidad para aumentar el presupuesto de Jalisco.
Sólo confirmó la liberación de los 700 millones que la Federación había prometido para el Peribús. Sobre la Línea 3, reafirmó la promesa de terminarla este año y dijo que analizarán la entrega de 240 millones extra para obras complementarias.
Para el resto de proyectos, adelantó el gobernador, habrá mesas de trabajo que se sumarán a las mesas de trabajo para revisar -en una mesa de trabajo- si se le puede aumentar el presupuesto al Estado. Traducción: bajen sus expectativas.
Por cierto, la impresión que dejó Herrera entre empresarios fue positiva; la de un funcionario preparado, técnico y claro en sus objetivos: la austeridad y la recaudación efectiva.
Dicen que la diferencia con Alfonso Romo, que a todo dice que sí, pero luego no puede cumplir, es que Herrera a casi todo dice que no, pero cumple cuando ha dicho que sí.
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La salida de Daniel Velasco Ramírez de la Secretaría de Seguridad Pública del Estado sacudió por dos razones.
La primera es que a muchos nos sorprendió enterarnos que había un secretario de seguridad estatal.
La segunda es que no entendemos una rotación en el gabinete de seguridad si las cifras de delitos patrimoniales van a la baja -según dice Jalisco Cómo Vamos que dice el gobierno-.
Resulta inverosímil la versión de que el cambio vino tras una manta que acusó al ahora ex secretario de complicidad con el crimen. Diario tenemos casos similares y no pasa nada.
Varios se inclinan más a pensar que entre tanto militar y coronel en la seguridad en el Estado -siete en total-, Velasco no logró ponerse de acuerdo o de plano no dio el ancho.