Un análisis de un jugador profesional
Este es un tema muy importante que toca un profesional de tenis, y que debe de servir de mucho para que todos los padres tengan en cuenta si quieren que sus hijos sean jugadores profesionales de tenis.
La carrera del profesional de tenis es muy dura, ya que tiene que estar viajando siempre por todas partes del mundo, en muchas ocasiones solo, sin un buen presupuesto para sus gastos, y menos para viajar con un entrenador, esto siempre pensando de querer ser un jugador del mundo. Y sobre este tema escribió en un Twitter el jugador canadiense Vasek Pospisil, quien prendió la llama.
Dio los datos acerca del porcentaje de los beneficios que repartían a los deportistas en diferentes deportes. Es decir, de todo el dinero que se genera en la Liga o torneo, lo que los verdaderos protagonistas reciben. Pospisil detalla que en la MLB se reparte 54.4%, la NFL 47%, la NBA y la NHL 50% y la PGA 33%. El US Open, en el año 2017, sólo repartió 14%, mitad para los hombres y mitad para las mujeres. En el resto de Slams y torneos M1000 se desconoce el dato, pero no será mucho mayor. “Es hora del cambio”, decía Vasek.
Por contra, los jugadores de Ranking Top 150 hacia arriba viajan en 99% de los casos solos, comiendo pasta con tomate cada día para ahorrar, compartiendo hostal con otros tantos y pidiendo ayuda económica a su familia tras ver que en una semana de torneo sólo generan 150 dólares (con suerte), a los que hay que restar hospedaje, transporte y gastos. No da.
¿Cuál es el coste de un entrenador y un fisioterapeuta? Pospisil, quien terminó el año pasado en el puesto 105 del ranking, explica que él pagó entre 300-400 mil dólares por 30 semanas. Su “prize money” en 2018 fue de 540 mil dólares, a los que hay que restar el tipo impositivo. “La media de ganancias de jugadores entre el Top 101-150 es de 276 mil 410 dólares”, explica. Esto hace imposible que nadie de este ranking se pague un entrenador y un fisio, ya que está en el tenista pagarle absolutamente todo. Hotel, comidas y transporte, aparte de un sueldo que puede variar en cada caso, siendo un porcentaje del “prize money” que el jugador gana, así como un sueldo base, o incluso uno mixto.
“Obtener sólo 14% de los beneficios no es justo (...) hay mucho dinero en este deporte y los Slams se llevan casi todo ellos. Los jugadores son el producto. Sin jugadores, no habría torneos”, defiende Pospisil, quien además de destapar esto, habla de otros problemas que deben encarar los jugadores, hablando siempre de la clase media o baja, ya que este no es un problema que tengan los tenistas del Top 10, por ejemplo. “En el tenis, los jugadores no tienen una representación legal que vele por sus intereses. En el circuito ATP, los torneos y los jugadores están representados por los mismos abogados y torneos y jugadores nunca tienen las mismas agendas”, comenta.
Y continúa. “Los jugadores del circuito ATP no tienen seguro por la pérdida de ingresos en el caso de una lesión. Esto quiere decir que una lesión supone la pérdida de posiciones en el ranking”, denuncia. “No creo que sea justo ver a tantos jugadores luchando cuando deberían ser recompensados mucho más. En según qué niveles, la compensación no es justa. El tenis es un deporte tan competitivo que debes invertir lo máximo que puedas en ti mismo y los torneos lo premian llevándose casi todo el dinero ellos mismos”, revela.
Los padres tienen que buscar patrocinadores para que sus hijos viajen y su carrera sea más fácil. Una buena fórmula sería hacer un equipo con cuatro o seis jóvenes y de esa manera pagan a un solo entrenador, entre todos pagan el boleto de avión, comidas, hotel y todo con el mismo patrocinador o si no alcanza dividirlo entre todos los jugadores.
Volviendo al tema del canadiense, creo que sería muy justo para todos los otros jugadores y así empezar a tener más oportunidad y para el tenis que salgan nuevas figuras, ya que no es lo mismo, que un jugador tenga masajista, encordador, entrenador, fisio, familia y otro más viajando todos juntos y en cada torneo.