Sheinbaum escapa a la sombra mañanera
Han sido tres semanas de búsqueda y lucha de la presidenta electa, Claudia Sheinbaum, para no dejarse eclipsar por la espesa e inmensa sombra que proyecta su mentor Andrés Manuel López Obrador, desde sus ruedas de prensa mañaneras.
Porque ha quedado claro que el Presidente saliente no cederá un milímetro y continuará no sólo con su alto perfil sino llevando de gira a la que será su sucesora. Como para dejar claro que el aplastante triunfo electoral de Morena y aliados en mucho se debe a él.
El más reciente esfuerzo de independencia, hecho con todo comedimiento por parte de Sheinbaum, fue la presentación el jueves pasado de las primeras tres mujeres y hombres que formarán parte de su gabinete. Ellas y ellos se suman a Rogelio Ramírez de la O, ratificado después de la jornada electoral como secretario de Hacienda, para calmar el nerviosismo de los inversionistas provocado por el regreso de la aplanadora guinda en el Congreso, que tiene la mira puesta en aprobar en fast-track la reforma al Poder Judicial.
Del gabinete de AMLO repetirán también aunque en distintas secretarías, Alicia Bárcena, actual secretaria de Relaciones Exteriores que será la próxima secretaria de Medio Ambiente; Marcelo Ebrard, que de haber sido canciller y rijoso competidor de Sheinbaum por la candidatura presidencial llegará a la Secretaría de Economía; y Juan Ramón de la Fuente, quien fungió como representante de México ante la ONU en el Gobierno de la 4T y será el siguiente titular de la cancillería mexicana.
Como cartas nuevas suyas Sheinbaum presentó a Julio Berdegué para la Secretaría de Agricultura; y a Rosario Ruiz para darle forma a la nueva Secretaría de Ciencias, Tecnología e Innovación. Y a quien fuera Fiscal de la CDMX durante su gestión como jefa de Gobierno, Ernestina Godoy, la nombrará como su consejera jurídica.
Sin duda, en este primer saque, Sheinbaum incluye en su Gobierno los cuatro mejores perfiles del Gobierno de López Obrador, y de paso, cumple en parte con las veladas exigencias de continuidad que le exige el fundador de Morena, pese a que en público asegura que no ejerce presión alguna a la que será su sucesora para la integración de su equipo.
Difícilmente el Presidente y el círculo más radical de la 4T que tiene cerca se conformará con el hecho de que en estos primeros siete miembros del futuro gabinete la mayoría haya participado en la administración obradorista, y seguramente irán por más.
Por eso habrá que ver si Sheinbaum salva esta cuarta semana con los nuevos nombramientos que tiene contemplado dar a conocer el próximo jueves, así como brilló la semana pasada que, excepto por el caso de Godoy y su controvertido paso por la Fiscalía de la CDMX, recibió el aplauso de propios y extraños por la reputación y capacidad intachable de los primeros integrantes de su equipo.
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