¿Sabes qué es un auto deportivo?
Hay dos tipos de personas: las que dicen “buenos días” y las que dicen “buen día”. Generalmente el segundo tipo es alguien con más preocupación por expresarse con precisión que en socializar de una manera cordial, aunque no necesariamente logre su objetivo, casi siempre por falta de la verdadera determinación para conocer el idioma tanto como piensa que conoce. Con los aficionados a los autos pasa lo mismo, hay los radicales que, basado en un criterio empírico y creencias personales, imaginan que un auto deportivo es sólo un coche rápido, casi sin ningún otro criterio aplicable. Bajo su óptica, un BMW M5 es un deportivo. Lo que probablemente no sepa e incluso es casi seguro que se enoje cuando lea esto, es que un Mustang es, en realidad, un sedán, no un deportivo.
Sí, se escucha pedante y lo es, pero por la definición original de la palabra, un sedán es un auto con techo rígido, no removible, con dos o cuatro puertas, que transporta a cuatro o cinco personas y con el área de carga separada del habitáculo. El detalle es que el idioma, al igual que los autos, evoluciona. En español la definición de sedán es posterior a la del término original en inglés y la Real Academia indica que un sedán necesariamente debe tener cuatro puertas, lo que quita un Mustang o un 911 de la categoría. Esto es mucho más cercano a lo que todos estamos acostumbrados, es decir, un sedán es un vehículo de tres volúmenes separados, cofre, habitáculo y cajuela, con cuatro puertas. Y un cupé es lo mismo, pero sólo tiene dos puertas.
Un vehículo deportivo, en su definición original, es un auto rápido, biplaza, fácil de manejar y con techo removible y de material blando. En otras palabras, un MX-5 es un auto deportivo, un Mustang, no. Ni siquiera la versión convertible del Potro entra en la categoría, pese a tener techo de lona, porque tiene asientos traseros. Inservibles, pero los tiene.
Nuevamente entra la evolución del idioma, que con mucha frecuencia pasa por los departamentos de marketing y de diseño de las marcas. De ahí que después del Mercedes-Benz GLS haya nacido el término “cupé de cuatro puertas”, que hoy prácticamente define a todos los sedanes en el mercado.
Crossovers y SUV
El segmento más amplio del mercado global hoy, las SUV, o vehículo deportivo utilitario, por sus siglas en inglés, no existía antes del final de los años 80. El término nació no de los vehículos en sí, que obviamente ya existían desde los años 30 del siglo pasado, pero eran vehículos militares o “station wagon”, es decir, vagonetas o guayín, con tracción en las cuatro ruedas. El término SUV nació para describir el estilo de vida supuestamente aventurero de los que compraban ese tipo de vehículos que eran, comparados a lo mucho más frecuente en la época, sedanes, hatchbacks y cupés, obviamente considerados utilitarios.
La Ford Explorer fue la que popularizó ese tipo de camionetas, la que hizo que los habitantes de la ciudad los quisieran usar. De repente un vehículo que era primariamente rural, pasó a ser “cool” en todos lados. Hoy, ya lo saben, dominan el mundo.
Como naturalmente casi nadie tiene ese estilo de vida aventurero, lo único importante es que el vehículo sea o se perciba más alto que un sedán. Antes, las SUV como la Explorer, usaban carrocería sobre chasis, pero luego apareció la Escape con su estructura monocasco y se creó el “crossover”, término que llegó más tarde que la compacta estadounidense. La verdadera popularización de esos vehículos arribó cuando el segmento de bajo precio descubrió que necesitaba algo así y se creó la EcoSport (otra vez Ford), que Alan Mulally casi mata por desconocer al mundo de los autos. Hoy, si queremos ser exactos, una SUV es una camioneta construida con carrocería sobre chasis, mientras un crossover es monocasco. La realidad es que los mexicanos tienen una mejor palabra que describe a todas: camioneta.
Particularmente me parece que las palabras que usan la gente en la calle terminan ganando. Internet, por ejemplo, ya es universal y nadie dice “red interconectada”. Yo cuando veo a un Mustang, un Corvette o un 911, pienso que son autos deportivos. Un MX-5 RF también, para mí no deja de serlo sólo por tener techo rígido, igual que un viejo Mercedes SLK.
Claro, entiendo y respeto a los que dicen “buen día”, pero que me parecen pedantes, sí me parecen.
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