Retorno a una nueva realidad
La arrancada perfecta de Verstappen con la que superó a Norris en la entrada a la primera curva del Circuito de Zandvoort levantó el alarido del público y las esperanzas de ver a su héroe hilvanar una cuarta victoria consecutiva en casa, desde que la máxima categoría regresó a los Países Bajos, en 2021.
Max, fiel a su estilo agresivo, intentó distanciarse del McLaren de Norris sin lograr separarse a más de 2 segundos del inglés, que una vez asimilado su error de la largada, recuperó la forma con paciencia, inteligencia y mejor velocidad promedio, dando cuenta del líder del campeonato mundial en la recta principal, al inicio del giro 18 de 72.
Una vez en la punta, la carrera se convirtió en un trámite para Lando, dándose el lujo de preguntar por la radio cuál era el plan a seguir.
Red Bull intentó revivir sus esperanzas de victoria anticipándose en el cambio por el compuesto duro en el giro 28 pero McLaren cubrió el undercut, optando por los mismos neumáticos, un giro después.
La carrera estaba sentenciada, solo un error podría cambiar el curso de las cosas, pero este nunca llegó, por el contrario, Lando manejó a la perfección incrementando su distancia vuelta tras vuelta y recibiendo la segunda bandera de cuadros en su palmarés, con una ventaja de 22.896 segundos sobre el tricampeón.
¿Qué significa esta diferencia de tiempo tan grande entre el ganador y su inmediato perseguidor? Que Norris giró 52 centésimas de segundo más rápido que Verstappen en las 44 vueltas restantes a partir del rebase, confirmando que el desempeño del MCL38 fue contundentemente mejor que el del RB20 a pesar de las mejoras que los de Milton Keynes presentaron en el circuito neerlandés después del receso de verano y que los de Woking establecen una seria amenaza en el devenir de ambos campeonatos, con nueve fechas por disputar.
Los 78 puntos de ventaja que le llevaba Max a Lando después del Gran Premio de Bélgica se redujeron a 70 y los 42 con los que Red Bull superaba a McLaren después de SPA se redujeron a 30, lo que confirma que de continuar la tendencia, la batalla por ambos campeonatos cobrará una importancia que no veíamos desde el 2012.
El campeonato de constructores parece ser el más complicado ya que aún con los 8 puntos que sumó Checo al terminar sexto, el resultado no es suficiente para contrarrestar las posibilidades de los autos color mango. McLaren sumó 38 unidades el día de hoy gracias al cuarto lugar obtenido por Piastri, mientras que Red Bull solo sumó 26.
Pérez mostró otra cara después del receso, calificando en la 5a posición y terminando 6o, a 16.646 segundos de Verstappen, lo que sin duda representa un gran avance ya que su ritmo de carrera con respecto al del campeón fue únicamente 23 centésimas de segundo más lento por vuelta.
Red Bull necesita fortalecer sus dos autos para la ultra rápida pista de Monza, donde se correrá el Gran Premio de Italia el próximo fin de semana. Por lo visto el día de hoy, es más probable que McLaren se siga distanciando, a que Red Bull cambie la nueva realidad que estamos presenciando.