Remesas si, voto ¿no?
Por si le faltara un elemento más de polémica al proceso electoral, habremos de agregar el asunto de la negativa que recibieron casi 40 mil mexicanos -39,724- que radican en el extranjero para votar en la elección presidencial del próximo 2 de junio. Como “balde de agua fría” cayó entre los paisanos la notificación del Instituto Nacional Electoral en donde se les “informa de su no inclusión en la Lista de Electores Residentes en el Extranjero, toda vez que de la revisión final a su solicitud se identificaron inconsistencias y/o una situación registral no válida”.
Por supuesto que la reacción de quienes recibieron la respuesta del INE fue de rabia, porque desde que salió la invitación a registrarse para tomar parte en el proceso electoral, enviaron solicitudes en el plazo establecido -antes del 25 de febrero-, además de haber recibido confirmación que todo estaba en orden y que habían quedado registrados. Y aunque el encargado del proceso electoral -el INE- les da la oportunidad de aclarar las inconsistencias, es un proceso que lleva tiempo, y cuando estamos “a la vuelta de la esquina” de la elección, podemos asegurar que esos más de 35 mil mexicanos -que quisieron a través de su voto expresar su decisión política- quedarán excluidos por esta ocasión.
La situación fue calificada en las redes sociales como “un atropello... son unos sinvergüenzas” por el expresidente Felipe Calderón, quien agregó que “tienen pavor a perder y ahora recurren a esto”. Aunque, en el universo de los votantes para elección, con poco más de 99 millones de mexicanos en la Lista Nominal del INE -que son los registrados para votar- solo 226,661 -según informó el INE el 27 de febrero- fueron los que se registraron desde el exterior, por lo que ahora -con los excluidos- serán alrededor de 190 mil, que significarian menos del 0.2 % de los electores. Solo como referencia, en la elección del 2018 -cuando López Obrador llegó a la presidencia- se registraron 181,873 y solamente la mitad votaron.
Sin embargo, más allá del interés o desinterés que los mexicanos en el exterior -que se estiman son más de 14 millones- puedan mostrar en el proceso electoral, el INE debe ser muy transparente al aclarar el porqué a pesar de la confirmación de que todo está estaba en regla con los registros, de que debidamente se cumplieron con los requisitos, de pronto surgen -para muchos extrañas- “inconsistencias” y los dejan fuera de ejercer su voto.
Las críticas, como las del expresidente Calderón y otros sectores, se encaminan a quienes ahora dirigen los destinos del Instituto Nacional Electoral, señalandolos como “aliados” del oficialismo y que quieren impedir que se escuche la voz de quienes están fuera de México. Hasta el momento la institución electoral ha cumplido cabalmente con la función para la que fue creada e incluso es ejemplo y reconocida a nivel internacional. Tenemos que creer que lo sucedido con los registros de los mexicanos en el exterior es porque realmente hay “inconsistencias” que avalan legalmente su “exclusión” y no quedarnos con la impresión que de los paisanos solo queremos la “fortuna” de sus remesas -63,313 millones en el 2023-, pero no su voto.
¿Usted, qué opina?
Daniel Rodríguez
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