Reforma laboral
La Cámara de Diputados aprobó la Reforma Laboral y la pasó al Senado. Si éste propone cambios sustanciales, la iniciativa de reforma se devolverá a la Cámara de Diputados, por lo que todavía falta para que los cambios propuestos a la Ley Federal del Trabajo se hagan efectivos.
Se puede anticipar cuáles son los principales cambios que se proponen, a reserva de ver en definitiva como quedan, estos son:
Mejora en las condiciones laborales de productividad; cumplirá con los compromisos adquiridos con Estados Unidos y Canadá en el marco del Tratado de Libre Comercio entre los tres países (T-MEC); cumplirá con las directrices de las autoridades internacionales del trabajo y no se toca el tema relacionado con el outsourcing; se establece la libertad de afiliación al sindicato, no se podrá obligar a nadie a afiliarse contra su voluntad, con esto desaparece la figura política conocida como “charrismo”, que consiste en un servilismo plegado a las autoridades del Poder Ejecutivo; se eliminan las juntas de conciliación y Arbitraje que tanto daño han causado a empresas y gobierno con sus absurdos fallos de indemnizaciones millonarias. Estas juntas serán sustituidas por Tribunales Laborales que dependerán del Poder Judicial de la Federación, no obstante, estos tribunales actuarán solo cuando se han agotado las instancias conciliadoras. Para el efecto se creará un Centro Federal de Conciliación y Registro Laboral y 32 centros locales, uno en cada entidad federativa, en donde se resolverán los conflictos laborales en primera instancia y de no llegar a un acuerdo, se pasarán a los Tribunales; de tal manera que no siendo la última instancia, se quitará la presión mediante la cual se han llevado a cabo miles de extorsiones, tanto a empresas como a diversas entidades gubernamentales en los tres niveles.
Otra de las sanas reformas es la democracia sindical que reconoce el derecho a la libertad sindical. Los sindicatos podrán perder su registro si incurren en actos de extorsión en contra de patrones. Solo se descontarán cuotas sindicales a trabajadores cuando lo acepten por escrito y la votación para elegir representantes sindicales será por voto escrito directo y secreto.
En el caso de la minería se multará con cinco mil UMAS a los patrones que por omisión provoquen la muerte de un trabajador.
Se regula el régimen de trabajadores del hogar; de momento continúa la afiliación voluntaria de los trabajadores domésticos, tendrán los mismos derechos de los demás asegurados. Ya está en servicio un programa piloto para afiliación de trabajadores del hogar.
Esta reforma no resuelve todos los problemas laborales ni corrige otras injusticias y abusos, pero es un buen intento por mejorar las actuales condiciones. Bueno sería que se reglamentara el aspecto de los despidos justificados, ya que en la práctica resulta actualmente imposible correr a un mal trabajador, inclusive en los casos en los que se le sorprende robando, pues las juntas de conciliación estiman indebidamente que es un truco del patrón para no indemnizarlo.
Otra práctica sana sería que en el sector público se contratara al personal de nuevo ingreso por tiempo determinado que dure el periodo de gobierno de nuevos funcionarios que están de paso, ya sea por elección popular o por designación, así dejaría de engrosarse la nómina con cada cambio de gobierno. La aplicación del Servicio Civil de Carrera que ya se practica en algunas dependencias, da la seguridad del trabajador de permanencia en el sector público, debería ser obligatorio.