Por fin
Más allá de si la medida se tomó a destiempo o no, el anunció que hizo ayer el gobernador de Jalisco, Enrique Alfaro, es atendible de cabo a rabo. Por primera vez desde que lo conozco y recuerdo, hace ya algunos años, escuché que dijo la palabra “autocrítica” y su tono, por lo general de regaño, rudeza y confrontación, fue distinto. No insultó, no se peleó con la Federación, al contrario; y exhortó a los jaliscienses a sumarse a las medidas porque sí, la situación es muy grave. La más grave en Jalisco desde que inició la pandemia.
No evitó las comparaciones, que además ya han sido cuestionadas, con respecto a la media nacional, sin embargo, lo que nos debe quedar muy claro como ciudadanos de a pie, como seres humanos que atravesamos por una situación inédita en el mundo, es que urge que quienes podamos, hagamos un esfuerzo mayúsculo por quedarnos en casa.
Las medidas que en un momento más referiré, nunca sobra repetirlas, reflejan por primera vez que hay aprendizaje de lecciones, a diez meses de distancia sí, pero bueno, ya están aquí y toca observarlas a pie juntillas, cumplirlas, pues, y no salir de casa a menos que sea estrictamente necesario.
Las medidas son siete, aplican en todo el Estado de Jalisco y estarán vigentes a partir de hoy y hasta el 31 de enero:
1.- No habrá regreso a clases presenciales. Esto ya lo había anunciado hace unos días la Universidad de Guadalajara, de manera que la medida se extiende a todos los niveles educativos en planteles públicos y privados. Siguen las clases virtuales, lo mejor en el contexto en el que estamos y en el entendido de que, aunque se ha prolongado la pandemia, es temporal. Ya vendrán tiempos propicios para retomar las clases en los planteles sin que la asistencia genere angustia y ansiedad en el estudiantado.
2.- Actividades no esenciales, tanto del sector público como del privado, no se realizarán de manera presencial, sino desde casa.
3.- Todas las actividades que favorecen la acumulación de personas se cerrarán, así como actividades lúdicas y de recreación. Entiendo que esto incluye a los bares y antros de todo tipo.
4.- Se cierran espacios públicos, abiertos o cerrados como unidades deportivas y parques especialmente. El gobernador dijo que no es momento de placear, de hacer de lo público un espacio de encuentro. Hoy, dijo, “necesitamos quedarnos en casa”.
5.- Se restringen las actividades sociales y familiares. No se permitirá la apertura de salones de eventos y se suspenden bodas, XV años y fiestas de este tipo. Reiteró varias veces que el principal espacio de contagios en Jalisco es este, las reuniones familiares, sin embargo, nunca se ha hablado de dónde se contagian quienes llevan el virus a esos encuentros. De algún lado llega. Me parece que puede ser hasta contraproducente hacer estas distinciones porque, a estas alturas, personas contagiadas con el virus SARS-CoV2 puede haber en cualquier parte, transporte público, por ejemplo, y otros sitios. Esto se restringe y queda en el terreno de la conciencia y voluntad de las personas y las familias.
6.- Las personas mayores de 60 años deben quedarse en casa.
7.- No se cierran actividades económicas de industria, comercio y servicios. Aquí, una vez más, dijo que estos no son los espacios de contagio, sino las casas de las personas. Pero ¿dónde lo pescan? Digo, hablando en términos coloquiales. Es aquí donde urge que no se relajen las medidas de protección y prevención que se han difundido desde el primer día: cubrebocas, sana distancia, lavado de manos, sana distancia. Y que todos los que podamos nos quedemos en casa.
La ocupación hospitalaria está llegando a términos críticos que no se habían registrado en 10 meses. En las últimas semanas del año pasado y las primeras de este 2021 es cuando se han registrado los números más altos para Jalisco y, la verdad, en este contexto, de poco sirve hacer las comparaciones si el problema lo tenemos aquí y ahora: en aumento exponencial casos activos, hospitalizaciones y defunciones, tasas de mortalidad y de positividad. Nada de lo que se diga para atenuar o disfrazar la realidad que estamos viviendo tiene sentido en este momento, como tampoco ocultar o minimizar datos o reiterar que estamos por debajo de la media nacional... valiente consuelo.
Asumir los errores, corregirlos, apelar a la conciencia y responsabilidad propia y de todas las personas es lo que se requiere y bueno, por fin; una vez más espero que dure. A cuidarse en extremo. #YoMeQuedoEnCasa #NosToca #NosNecesitamosJuntos.
lauracastro05@gmail.com