Optimismo y Oración
Para reflexionar y también para conservar una buena actitud, lo mejor sin duda es buscar el lado bueno de las circunstancias que nos toca vivir.
Y como el ingenio de los mexicanos es inagotable, siempre estamos dispuestos a reírnos de todo y a hacer chiste hasta de lo más trágico.
Prueba de ello es que me acaban de enviar una serie de refranes que si no son precisamente graciosos sí son muy ocurrentes.
· Más vale mascarilla en boca que toser a la loca.
· A Dios rogando y en tu casa orando.
· Bendita cuarentena que a ninguno nos llena.
· A papel regalado, no se le mira la marca.
· Más vale estornudo controlado que virus regalado
· No por mucho madrugar, es para salir a callejear.
· Aunque la mona se vista de seda, en casa de queda.
· No hay cuarentena que dure 100 años, ni cuerpo que la resista.
· Al mal tiempo buena casa.
· Aunque no vivas en un convento, quédate adentro.
· Todos los caminos llevan al refrigerador.
· Más vale viejito encerrado, que muy pronto enterrado.
· Si la gripe suena, ponte en cuarentena.
· Algo pasó por aquí y a todos nos encerró.
· Caras vemos, Covid-19, no sabemos.
Quien madruga halla todo cerrado.
Camarón que no se cuida, lo llevan al hospital.
A ese virus no le creo, porque no lo veo.
Quien no escucha consejos, no llega muy lejos.
Y si sabes otros más, vamos a poner en juego la astucia y la imaginación para pasar un buen rato.
Pero lo más importante:
Aprende e escuchar tu corazón y no el miedo de otras personas.
Pero también es bueno subir de nivel y elevar una sencilla oración porque “Cada mañana tiene un nuevo comienzo, una nueva bendición y una nueva esperanza. Es un día perfecto porque es un regalo de Dios”.
ORACION
Dios mío Ven, ven a caminar con nosotros
en estos momentos en que el cansancio
la incertidumbre y la enfermedad nos agobian.
Ven cuando el desaliento nos oprime
y no nos deja mirar de frente hacia el futuro.
Ven,
cuando la tentación de anclar es más fuerte,
cuando el dolor nos desgarra,
cuando nos falta la fuerza,
para afrontar la vida nueva cada día.
cuando los contratiempos causan pereza y desaliento...
porque contigo tengo la certeza de sanar y seguir adelante,
superando cualquier obstáculo y de llegar felizmente a la meta fina.