Nadie marchará por las comisiones bancarias
Esta vez no se trató de un tema que se hubiera debatido en la campaña presidencial, ni de una consulta, ni de varias semanas de discusión en los medios informativos. Fue un documento de apenas 11 cuartillas, proponiendo la modificación a dos artículos de dos distintas leyes federales el que ocasionó un terremoto financiero el pasado jueves 8 de noviembre que llevó a la bolsa a perder 5.81% de su indicador, lo que representó una pérdida de capitalización de 82 mil millones de pesos (MDP), así como la drástica caída de las acciones de las instituciones bancarias.
El documento de 11 cuartillas que provocó dicho terremoto financiero fue la iniciativa para regular las comisiones bancarias presentado en el Senado de la República por la legisladora Bertha Alicia Caraveo Camarena, a nombre de Ricardo Monreal, coordinador de los senadores del Movimiento de Regeneración Nacional (Morena).
La iniciativa contempla simplemente dos modificaciones: adiciones al artículo 4 Bis de la Ley para la Transparencia y Ordenamiento de los Servicios Financieros y otra modificación al último párrafo del artículo 48 de la Ley de Instituciones de Crédito. Sólo eso, pero esas modificaciones podrían costar miles de millones de pesos a los bancos nacionales y extranjeros que operan en México.
Aunque la gran mayoría de los mexicanos pagamos algún tipo de comisión en alguno de los bancos que operan en el país, poco sabemos a cuánto ascienden sus ganancias por este concepto. En el año 2016 los ingresos por comisiones cobradas por los bancos fue de 100 mil MDP, el año pasado el monto ascendió a 108 mil MDP y entre enero y agosto de este año, las comisiones ascendían a 106 mil MDP, lo que quiere decir que en el año en curso los bancos romperán récord de ingresos por estos cobros que hacen a sus clientes, la mayoría de las veces sin saberlo.
Por eso no es casual que los banqueros y los inversionistas en la bolsa pusieran el grito en el cielo, pero de otro lado, muchos mexicanos gritaron de felicidad al conocerse la posibilidad de poner un freno en algunas comisiones, mientras otras simplemente desaparecen. Por ejemplo, en la iniciativa de Monreal se propone eliminar el cobro de la anualidad por el manejo de tarjetas de crédito. Sólo por el cobro de dicha comisión, los bancos obtuvieron ingresos por 18 mil 832 MDP el año pasado. El cobro de comisiones por manejo de tarjetas de cuenta representa un gran negocio para los bancos.
Lo que los legisladores de Morena recogen en dicha iniciativa ha sido denunciado por muchos críticos de la privatización de los servicios financieros: que los bancos en México cobran aquí comisiones como no lo hacen en sus países de origen. Por ejemplo, Santander obtiene 39% de sus ingresos por comisiones aquí, y apenas 20% en España; Bancomer gana por comisiones 36% de sus ingresos y en España apenas 19 por ciento.
A todas luces, son abusos que la banca comete en contra de los usuarios en México, permitido y tolerado por las autoridades. Son tantos años de abuso de la banca que apuesto a que esta vez nadie convocará a una marcha en defensa de las comisiones, ni de los banqueros.