Millones renuncian a sus trabajos
En lo que va del año - hasta el mes de septiembre- 30 millones de estadounidenses -casi el diez por ciento de su población- ha renunciado a sus trabajos. Sí, renunciado, no ha sido despedida, según revela esta semana el Departamento de Trabajo. Y como paradoja -para muchos-, la tasa de desempleo llegó a 5.2 por ciento, la más baja desde el inicio de la pandemia -que es muy superior al 3.5 por ciento que se tenía en febrero del año pasado y muy lejos del pico de 14.7 por ciento del mes de abril-, y hay miles de posiciones abiertas en todos los negocios.
Muchos atribuyen la elevada cantidad de personas que abandonaron sus trabajos -tomando como argumento las consecuencias de la pandemia-, a la generosa ayuda financiera que el gobierno proporcionó hasta el pasado mes de septiembre. Sin embargo, a pesar de la terminación del apoyo económico muchos no regresaron a su empleo y las posiciones vacantes permanecen abiertas.
Y no se puede tomar como referencia la tasa de desempleo calculando el número de personas que cobran seguro de desempleo, como muchos opinan que hay contradicción en las estadísticas. La fórmula de desempleo se basa en dividir la cantidad de personas desempleadas, por la población económicamente activa y multiplicada por 100 para sacar el porcentaje.
Dicen los estudios del fenómeno laboral a consecuencia de la pandemia, como es el caso del profesor Anthony Klotz de la Universidad Texas A&M, que “esta transición a una era post-pandémica en la vida laboral está siendo definida por lo que se ha llamado ‘la gran renuncia’. Las personas que se habían aferrado a los trabajos durante la pandemia debido a la incertidumbre, ahora están listas para hacer un cambio y dejar su trabajo actual en favor de algo mejor”, dijo durante una entrevista con Bloomberg Businessweek.
Dijo Klotz que ese “algo mejor” puede ser la libertad de trabajar desde casa, sin necesidad de desplazarse, con horarios más flexibles, con mejor remuneración y mejores oportunidades de progresar, además de que muchos se dieron cuenta que tienen otro tipo de habilidades que que fueron descubiertas la tomarse medidas extremas con la crisis de salud.
Para otros especialistas en la materia esta tendencia continuará y posiblemente el número de personas que abandonen sus trabajos fijos aumentará en los siguientes meses. Por ejemplo, un estudio de Microsoft encontró que el 41 por ciento de sus trabajadores está considerando dejar su trabajo. En ese nicho los miembros de la Generación Z -aquellos nacidos en los últimos años de los 90’s e inicio de los 2000- son los más predispuestos. Mientras que Gallup indica que la cifra de personas que están planeando dejar su empleo e independizarse, es el 48 por ciento de los empleados.
Es asombroso que un virus que provocó una crisis sanitaria y que tanto daño ha causado a la humanidad, ha estimulado a descubrir a millones de personas sus habilidades laborales y los ha motivado a buscar nuevas experiencias de supervivencia. ¿Usted, qué opina?
daniel.rodriguez@dbhub.net