Mes 1 de Sheinbaum, 1 periodista muerto
Las primeras obras y acciones de gobierno que ha iniciado Claudia Sheinbaum en su primer mes de gobierno, se han perdido en medio de la turbulencia política en la que le dejó el País su antecesor y mentor político, Andrés Manuel López Obrador, por su afán revanchista contra el Poder Judicial de la Federación, y que hoy la tiene metida defendiendo la “supremacía constitucional” ante las y los ministros que la quieren echar abajo, y que denuncian que estamos ante una “crisis constitucional”
Además, la emoción social que causó la llegada de la primera mujer a la Presidencia de la República en la historia de México, se ha ido apagando muy rápido, por los crecientes episodios de violencia extrema causados por los grupos del crimen organizado en distintas regiones del País, destacando desde luego la narco guerra en Sinaloa, que no deja de provocar tensiones entre México y Estados Unidos, porque Sheinbaum al igual que AMLO, defiende al impresentable del gobernador Rocha y culpa de las sanguinarias batallas de sicarios en Culiacán a las autoridades de EU por el “secuestro” de “El Mayo” Zambada, mientras el Embajador gringo, Ken Salazar, les responde que lejos de reclamar, esa detención se debía festejar.
Para sumar una corriente más a esas turbulencias, a dos días de cumplir el mes uno de su gobierno, inició el trágico conteo de asesinatos de periodistas, que en las últimas dos décadas ha colocado a México como uno de los países más riesgosos para ejercer el periodismo.
El primer periodista caído del sexenio, fue Mauricio Cruz Solís, un joven colega de apenas 25 años, a quien se le arrebató la vida y su carrera en pleno centro de Uruapan, Michoacán, minutos después de hacerle una entrevista que transmitió en vivo en su portal “Minuto por Minuto”, al alcalde de ese municipio, Carlos Manzo Rodríguez, la noche del martes.
Según testigos, instantes después de la charla con el Presidente Municipal, una camioneta freno a unos metros de él, y de ella descendieron sujetos armados que le dispararon en forma directa. El alcalde sólo atinó decir que al oír las detonaciones pensó que el ataque iba dirigido a él, por la violencia que priva en esa ciudad y por las amenazas que ha recibido de su antecesor, a cuyo gobierno liga con el crimen organizado.
Es altamente preocupante que la lista de agresiones mortales contra periodistas inicie a menos de que se cumpla un mes del nuevo sexenio.
Para honrar la muerte de Mauricio, el gobierno de Sheinbaum está obligado a pronunciarse al respecto, y sobre todo a exponer cuál será su política para garantizar la libertad de expresión, el derecho a la información y la integridad física de periodistas y defensores de los derechos humanos, para por ningún motivo permitir que se llegue a la inaceptable cifra de 38 periodistas asesinados como ocurrió en el primer sexenio de la 4T.