Más privilegios…
Ayer les contamos que en el Poder Judicial de Jalisco se avaló repartir gasolina al presidente y a los jueces de la metrópoli, pero en el Consejo de la Judicatura también se verán beneficiados los consejeros, el secretario general, los directores y los jefes, entre otros. Eso provocó el malestar de trabajadores sindicalizados, quienes cuestionaron que los beneficiados son los que más ganan. Y tienen razón.
Tan sólo el presidente Daniel Espinosa Licón tiene un salario de 173 mil 744 pesos mensuales, además del aguinaldo de 335 mil y la prima vacacional de 122 mil pesos. ¿Es todo? No.
Según su página de Transparencia del Supremo Tribunal de Justicia de Jalisco goza de una “homologación mensual” de más de 26 mil pesos, así como una “renivelación mensual” por 35 mil pesos. ¿Alguien sabe por qué se entregan esos estímulos?
Y eso que hasta el próximo año, el Poder Judicial tendrá un jugoso incremento presupuestal autorizado por el gobernador de Jalisco.
Por poco y se nos va, pero también recibe mil 089 de despensa mensual.
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Semana difícil para los competidores que aspiran a la “coordinación” de la 4T, porque no se puede decir a la candidatura presidencial.
En estos días se decidirá cómo va la encuesta para elegir al ganador (aunque más bien ganadora). ¿Será una o más preguntas? ¿Cuántos encuestados serán y en dónde? Y sobre todo: ¿Cuáles serán las empresas encuestadoras, porque mucho se teme que “el que paga, manda”.
Y como las broncas están a la orden del día, ya salió un desplegado de una organización que se llama “Coordinación Nacional de Diálogos Progresistas”. Si bien no lo dice, se nota que apoya a Marcelo Ebrard, por lo que denuncia, en un texto con mayúsculas, que se están dando “prácticas perversas” en esta etapa de la contienda “para favorecer a ciertos aspirantes en el proceso interno”. ¿Será?
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A propósito de morenistas, en esta semana estaban “amarradas” las visitas de Marcelo Ebrard y Adán Augusto. El primero el viernes 18 y el segundo, el sábado 19. Pero algo pasó.
Dicen los que andan en los difíciles enjuagues de la agenda, que Ebrard cambió la fecha y la sede: no viene el viernes, sino el sábado. Y no llega a Guadalajara, sino que se va a Puerto Vallarta a un encuentro nacional de jóvenes.
El ex secretario de Gobernación, Adán Augusto, todavía está firme para el sábado, pero en Guadalajara. Obvio, no quieren coincidir. ¿Habrá cambios?