Los reclamos a los árbitros electorales
Las quejas acumuladas a menos de un mes de que terminen las campañas electorales, obligan a las y los integrantes del consejo general del Instituto Electoral y de Participación Ciudadana de Jalisco (IEPC), así como del Tribunal Electoral del Estado a trabajar con toda precisión e imparcialidad para cumplir a cabalidad su papel de vigilantes de las elecciones antes, durante y después de las votaciones del domingo 2 de junio.
Más aún porque los reclamos han venido del lado de los partidos opositores, que reprochan decisiones de la autoridad electoral que da ventajas a Movimiento Ciudadano, partido en el poder en Jalisco, y que por cierto, ha respaldado en todo momento el desempeño del IEPC.
El último roce entre candidatas opositoras y las autoridades electorales se registró antier que el IEPC convocó a las y el candidato a la gubernatura de Jalisco a la firma del llamado Acuerdo por la Integridad Electoral y la Vida Cívica Estatal, en donde la candidata de Morena-Verde-PT-Futuro y Hagamos, Claudia Delgadillo, condicionó signar el acuerdo a la firma de la presidenta del IEPC, Paula Ramírez, a un pliego petitorio, que entre otras cosas, demandaba denunciar la inequidad en la cobertura informativa de las campañas. En el mismo acto, la dirigente perredista y candidata al Senado por el PAN-PRI-PRD por la segunda fórmula, Natalia Juárez, pidió la renuncia del presidente del Tribunal Electoral, Tomás Vargas Suárez, a quien, presente en el acto, le reclamó no disculparse por el doble sentido con el que, acusan, se refirió a una compañera de trabajo. Por cierto, otro de los reproches de Morena al IEPC es haber exonerado al candidato emecista, Pablo Lemus, del señalamiento de ejercer violencia política en razón de género, al haber referido una “relación íntima” de Delgadillo con el ex Presidente Enrique Peña Nieto, en el segundo debate electoral.
En este mismo evento en el Instituto Cultural Cabañas, el dirigente del PRI, Antonio Padilla, quien ha denunciado que el Gobierno estatal ha negado protección a algunos de sus candidatos que la han solicitado, llamó a que la autoridad electoral hiciera “un doble esfuerzo” para que autoridades federales y estatales eviten que las organizaciones criminales “coaccionen el voto” y se conviertan en el ”gran elector”.
Al igual que hace tres años, los morenistas y aliados también reclamaron al IEPC haber negado el registro de más de 20 candidaturas a presidencias municipales, argumentando incumplimiento de requisitos y tiempos, decisión que más tarde les corrigió el Tribunal Electoral, ordenando que se les permitiera la participación en la contienda electoral.
Como en el futbol, en estas últimas semanas de campañas será cuando las y los candidatos aprieten más la pierna, por lo que el árbitro electoral deberá estar muy atento para penalizar las faltas con toda imparcialidad, y así llevar la competencia electoral a buen puerto y salir de la cancha sin abucheos.
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