Los choques lamineros
¿Se imaginan una vialidad fluida en hora pico en las arterias más importantes de la ciudad incluso con uno o más accidentes involucrados? Muchos hemos padecido el tráfico atroz de una arteria como López Mateos, Periférico Poniente, Boulevard Bugambilias, Mariano Otero o Carretera a Chapala; se llega tarde, se pierden vuelos y el día colapsa. Todos hemos sido testigos -ojalá no víctimas- de algún percance vial, y también hemos padecido un engorroso proceso para salir del paso y de las miradas incisivas del resto de los automovilistas afectados. El pasado viernes conté al menos cinco percances viales en mi camino al trabajo, sólo en un fragmento del día y sólo en una arteria de la ciudad. Hagamos cuentas…
A partir de este jueves entra en vigor el acuerdo que firmaron las autoridades estatales y la Asociación Mexicana de Instituciones de Seguros para evitar que los choques llamados “lamineros” colapsen la ciudad. La iniciativa considera que, mientras el percance no sea de consideración y no haya personas lesionadas, las unidades pueden moverse a un lugar seguro para continuar el procedimiento con los ajustadores, por lo tanto ambas unidades deberán contar con un seguro mínimo obligatorio vigente.
Digamos que es una invitación a mantener la responsabilidad de daños a terceros de nuestra póliza al día y con ella los beneficios de aminorar el caos vial, pues no sería posible si no contamos con ella; de acuerdo al Inegi, Jalisco cuenta con 4.1 millones de autos registrados, pero sólo la mitad están asegurados.
De los más de cinco mil 500 percances reportados en lo que va del año, cuatro mil se registraron como “lamineros”, por lo que hacer que éstos aminoren los efectos del tráfico a través de la iniciativa.
Se estima que el tiempo de respuesta par liberar una unidad de la vialidad si se cumplen los requisitos sea de aproximadamente 20 minutos, toda vez que la aseguradora correspondiente valide la situación y autorice mover la unidad, a diferencia de los 45 a 60 minutos que hoy día implica que un ajustador llegue al punto de siniestro, y ello no significa que de inmediato se expidan los pases correspondientes, pues no siempre están aseguradas las unidades en cuestión.
¿Es un negocio redondo? Posiblemente. Y para adquirir una póliza de seguro para un auto todo importa, no sólo las características del vehículo, también la zona en la que habitamos, la edad que tenemos y si somos hombres o mujeres. Sí, en nuestra póliza de auto el género también importa. Cada compañía tiene su propio tabulador, pero la póliza más económica de responsabilidad civil podría alcanzar los mil 500 pesos anuales, y ésa es necesaria para poder participar en el beneficio del acuerdo.
Negocio o no, bienvenida la posibilidad no sólo de disminuir el tráfico en los corredores viales más importantes -sabemos que López Mateos se lleva las palmas al respecto- también se trata de garantizar la seguridad de aquellos afectados en un siniestro y con ello disminuir remisiones a corralón o regresar a casa con la carga completa de un daño sin ser responsables de ello, pues, dicho sea de paso, uno de esos percances “sin importancia” podría representar un impacto al bolsillo entre los cinco y los 25 mil pesos para cada implicado.
Opiniones habrá muchas y todas respetables, lo cierto es que se trata de un ejercicio de responsabilidad que nos obliga a pensar más allá de nosotros mismos y garantizar la integridad de los otros. Crucemos los dedos para que los resultados sean positivos.
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