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Lo que faltaba, comando en Andares

La semana pasada consigné aquí que a la estela récord de muertes por la pandemia del coronavirus en enero en Jalisco, debíamos sumar los muertos por el inicio violento que tuvimos también en este 2021, y que dejó tan sólo en un fin de semana 37 homicidios, tanto en la Zona Metropolitana de Guadalajara como en municipios del interior del Estado, incluidos episodios de homicidios múltiples, como en Guadalajara, donde un grupo armado acribilló a cinco hombres, o en el municipio de Ojuelos, donde otro grupo de hombres armados asesinó a una mujer y seis varones.

Señalé también que en los primeros días de febrero de igual manera se habían desatado los demonios, con levantones, más feminicidios, cuantiosos asaltos conejeros, el hallazgo de cadáveres en cada vez zonas más céntricas de la ciudad, y los asesinatos a plena luz del día y en las avenidas más transitadas de la ciudad.

Esta última expresión de inseguridad, impunidad y de complicidad de los cuerpos policiales, por miedo, omisión o corrupción, se volvió a repetir ayer en la zona de Andares, una de las zonas mas vigiladas de la ciudad, a donde llego un comando, de entre 12 y 14 hombres con chalecos antibalas que se movían en dos camionetas pick-up, y dos autos sedan de reciente modelo hasta las afueras del restaurante Los Otates (marca que fue tendencia nacional número uno en las redes sociales luego de la balacera) y entraron para levantar a uno de sus comensales, lo que desató un tiroteo en el que hicieron gala de su poder de fuego, y de su poder corruptor al escapar por la Avenida Patria en la hora de más tráfico sin que nadie los molestara, pese a llevar en la caja de una de las pick-up a un hombre herido.

El hecho de que en el lugar hubiera estado un escolta de Juan José Frangie, ex coordinador del gabinete del gobierno zapopano y candidato del partido Movimiento Ciudadano a la alcaldía de ese municipio, quien intentó enfrentar a los agresores, hizo circular el rumor de que él sería el objetivo, lo que no era así.

Versiones extraoficiales hablan de que el hombre que se ve en los videos que es sacado caminando del restaurante sería el dueño del Distrito 5, restaurante-bar donde asesinaron al ex gobernador el 18 de diciembre pasado, lo que haría vincular este caso al magnicidio.

Mientras estas versiones se confirman o se descartan, lo cierto es que esta serie de crímenes y hechos violentos de alto impacto aumentan la percepción de inseguridad entre los jaliscienses, y hacen palidecer los avances en la baja de los delitos patrimoniales con los que el gobernador Enrique Alfaro asegura que en materia de seguridad se va por la ruta correcta.

jbarrera4r@gmail.com

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