La posibilidad de tener tres Papas
El 28 de enero del 2013 Benedicto XVI dejó de ser Papa, casi ocho después de asumir la máxima posición de la iglesia catolica. ¿El motivo? Joseph Ratzinger, en aquel entonces de 85 años de edad, ya había sufrido una embolia, tenía complicaciones cardiovasculares, problemas de hipertensión, ceguera en un ojo y algunos incidentes de desmayos en los últimos años. Fue por ello que “por falta de fuerzas” -dijo Benedicto- dio un paso al lado para que el cónclave -institución creada en 1274 para la elección democrática de los Papas por parte de los cardenales -eligiera a su sucesor, que a la postre sería el Papa Francisco. Hoy, el Papa emérito en retiro vive en Mater Ecclesiae, que es un monasterio en Ciudad del Vaticano, dando paso a la coexistencia de dos pontífices, que no es algo común en la historia del Vaticano, pero que se ha presentado varias ocasiones.
La última renuncia de un Papa fue en 1415 cuando Gregorio XII abandonó el cargo dos años antes de morir, y fue precisamente en esos años cuando se presentó un caso insólito de que tres Papas alegaban ser los verdaderos sucesores de Pedro, aunque a la postre ninguno fue declarado emérito, como es el caso de Benedicto XVI.
En la actualidad, podríamos estar en la antesala de una histórica posibilidad de tener tres Papas.
Apenas la semana pasada el Vaticano canceló el viaje para el mes de junio tenía planeado el Papa Francisco. Y hace apenas unos días el Sumo Pontifice -de 85 años de edad- fue visto por primera vez en silla de ruedas en un acto público. El Papa sufre dolores de rodilla y de cadera que lo hacen cojear y en julio del año pasado fue sometido a una operación de colon. El 28 de abril, durante la audiencia semanal de los miércoles, el Papa apareció con el rostro cansado, sentado e hizo una confesión inhabitual. Después de hacer un llamado a la paz en Ucrania pidió disculpas “porque esta rodilla no termina de sanar y no puedo estar de pie tanto tiempo”. A principio de ese mismo mes en su visita a Malta se le notó con grandes problemas para desplazarse.
Fuentes allegadas al Pontífice -se reporta en medios italianos- señalan que que el Papa no tiene la intención de renunciar, pero hay quien aseguran que para el Papa se acabaron los viajes largos, las jornadas prolongadas de trabajo, tiene que estar sometido a terapia permanente y bajo severa observación.
Ahora bien, el Papa Francisco no solamente se enfrenta a sus problemas físicos, sino también a una gran presión del sector tradicionalista de la iglesia que constantemente se opone a sus propuestas de actualizar las reglas del catolicismo, y esa constante lucha interna le ha restado energía para cumplir con sus objetivos de reforma emprendidas para un catolicismo con una mirada más social más acorde a la actualidad que vivimos.
Sin embargo, los ‘opositores’ internos del Papa Francisco dentro de la cúpula de la iglesia ‘en lo oscurito’ -dicen los expertos en el tema- ya perfilan a algunos cardenales que pudieran aspirar a llegar a la máxima posición en el Vaticano en la remota posibilidad -hasta el momento- de que Francisco declinara por sus problemas de salud.
Cualquier cosa pudiera suceder. Mientras tanto el Papa continúa formando un colegio cardenalicio acorde a su pontificado, con la intención de que sean ellos lo que culminen con sus reformas emprendidas.
¿Usted, qué opina?
daniel.rodriguez@dbhub.net