La emergencia por el dengue que viene
La pesadilla que se vivió en Jalisco con el dengue en 2019 amenaza con volver en este 2024 si gobierno y ciudadanos no toman las previsiones necesarias, según advierten las propias autoridades de salud.
Desde el viernes pasado se emitió una alerta sanitaria ante el incremento de casi el ocho mil por ciento de casos respecto al año pasado. Mientras en la semana epidemiológica número 26 del 2023 había sólo ocho casos, ahora se han detectado ya 633.
En la crisis de salud por el dengue del 2019, que degeneró incluso en una crisis política en la que la oposición solicitó en el Congreso local la renuncia de las autoridades de salud, se registraron más de 12 mil casos y la muerte de 108 pacientes.
El viernes pasado, la Secretaría de Salud admitió que por la llegado del dengue tipo 3, prevén que se superen los 14 mil casos.
En 2019 el escenario catastrófico y la saturación en hospitales por ese padecimiento se empezó a ver venir por el crecimiento exponencial de los casos que empezaron en junio con 91, en julio con 169, en agosto con 651 y en septiembre que se acabó de disparar al superar la barrera de los mil casos hasta llegar a los más de 12 mil casos al final de la temporada de lluvias, lo que ubicó a Jalisco como una de las entidades en la que más contagios hubo.
En este 2024 el disparo en el número de positivos se da en apenas un mes y sigue creciendo, por lo que desde la semana pasada se prendieron los focos rojos en la Secretaría de Salud, y su titular, Fernando Petersen, salió a alertar de esta situación el viernes pasado en una rueda de prensa.
En 2019, cuando empezaba el sexenio de Enrique Alfaro y las nuevas autoridades de salud enfrentaban su primera temporada de dengue, hubo reclamos de vecinos que aseguraban que no habían visto, como otros años, a las brigadas de fumigadores y orientadores de la Secretaría de Salud que desde mayo hacían trabajos preventivos en sus comunidades. Se achacó además a las autoridades sanitarias no haber colocado oportunamente las llamadas ovitrampas para evitar la reproducción del mosco transmisor y hasta el uso de productos caducados, y que a eso se debía la proliferación del dengue que se había quintuplicado en relación al 2018. Luego esos reproches se escucharon por la saturación de pacientes en los hospitales.
Las autoridades de salud aseguraron el viernes pasado que han reforzado y aumentado las cuadrillas de fumigación, ante esta emergencia de salud que ven venir por la llegada del dengue tipo 3, que esperemos no sea tan catastrófico como hace cinco años. Sobre todo por el riesgo que significa para el gran número de personas que se enfermaron del dengue en el 2019 y a las que infectarse ahora del serotipo 3 les podría generar mayores y más dolorosos síntomas o incluso la muerte.
jbarrera4r@gmail.com