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¿Justicia y gracia para policías acusados por desapariciones?

Nuevamente el tema de las desapariciones, problema número uno de inseguridad en Jalisco, se liga al de la infiltración delincuencial y corrupción policial. 

Ahora toco a la Policía de Tlajomulco (municipio donde muy frecuentemente se da el eje delincuencial ligado a las desapariciones como lo son el tiradero impune de muertos, el hallazgo de fosas clandestinas y la operación de casas del terror donde se priva de la libertad, se tortura y se mata), que el miércoles llegaran elementos de la Fiscalía Especial en Personas Desaparecidas para hacer una revisión a la corporación y detener a tres policías por su presunta participación en casos de privaciones ilegales de la libertad. Ayer se confirmó que finalmente fueron cuatro los uniformados de esa Comisaría presentados ante el juez.

Apenas hacía un mes, Zapopan también se había unido a la ya muy larga lista de municipios en los que algunos jefes policiales y/o varios de sus elementos, en vez de proteger al ciudadano de los raptores, se pusieron del lado de los delincuentes para cometer los levantones con la complicidad policial. 

Fue cuando se detuvo, también por agentes del área de Personas Desparecidas, a Maximino “V”, primer comandante zapopano del Sector 3. 

Con este y el caso de Tlajomulco, ya ningún municipio de la Zona Metropolitana se salva de tener elementos policiales acusados de participar en desapariciones, lo que tumba también la idea de que este lastre sólo ocurría en municipios pequeños con Policías débiles y superadas por las bandas del crimen organizado. 

Los cuatro policías detenidos esta semana de Tlajomulco se suman a la lista de más de 50 acusados de estar vinculados a desapariciones de comisarías de Guadalajara, Tlaquepaque, Tonalá y al menos de 10 municipios del interior del Estado: Atotonilco, San Ignacio Cerro Gordo, Tecalitlán, Autlán, Colotlán, Encarnación de Díaz, Teocaltiche, Mezquitic, Casimiro Castillo y Acatic.

Para ensombrecer más este panorama, familiares de desaparecidos ven con mucha preocupación que mientras antes se acusaba y se consignaba a los policías coludidos del delito de desaparición forzada, en los últimos casos el personal de la Fiscalía Especial de Personas Desaparecidas sólo los esté acusando por el delito de abuso de autoridad, como ocurrió ayer con los cuatro policías de Tlajomulco en la audiencia de vinculación a proceso en la que se les dictó prisión preventiva, que podrían librar en 144 horas.  

Por eso, bien haría esta Fiscalía Especializada en explicar a los familiares afectados por qué se ha dado este giro y no se les imputa por otros delitos que tengan que ver de forma más directa con las desapariciones, para borrar la idea de que se está protegiendo a los que incumplieron su obligación de proteger a la población y se fueron de lado de los que han provocan el más grande lastre que sufren los jaliscienses.

jbarrera4r@gmail.com
 

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