Johnny Depp y el #MenToo
El triunfo del actor Johnny Depp en el juicio contra de su ex esposa, la también actriz Amber Heard, es mucho más que un asunto de la farándula. Ella fue condenada a pagarle 15 millones de dólares por difamación, tras señalar que era víctima de violencia.
En un artículo publicado en The Washington Post, Amber Heard dijo que sufrió abuso doméstico, y en respuesta, él la demandó por difamación. En la demanda el actor de “Piratas del Caribe” pedía 50 millones de dólares; entonces, la protagonista de “Aquaman” respondió con una contrademanda por 100 millones de dólares. Ambos dijeron haber perdido contratos laborales a raíz de los señalamientos de violencia en su relación.
En el juicio, que concluyó este miércoles, se hicieron públicas intimidades de la pareja. Durante semanas se presentaron testimonios, fotografías y acusaciones de lo que pasaba detrás de las puertas de su casa, lejos de los reflectores. El jurado no creyó las declaraciones de la actriz.
Del #MeToo donde ella era la agredida, en redes sociales se pasó al #MenToo con él como víctima no sólo de difamación, sino también de abuso doméstico. Los testimonios de ambos durante el juicio iban desde las agresiones verbales hasta la violencia física de manera mutua.
La ONU Mujeres ha difundido desde hace varios años un “Violentómetro”, en el que muestra y visibiliza las violencias más representativas y cómo estas van escalando: de las bromas hirientes, humillaciones y celos, pasando por los insultos, jaloneos y ofensas hasta llegar a los golpes, la violación, las amenazas de muerte y, en ocasiones, terminando con la vida. En el juicio de ambos actores, ejemplos hubo de sobra.
El #MeToo surgió desde hace años como un movimiento para visibilizar la violencia de género, la que sufren miles de mujeres; nació para darles voz, para que contaran sus historias, para decir “yo también, a mí también me pasó”. Pero, sobre todo, se volvió un lema de batalla, un respaldo colectivo de mujeres para exigir justicia ante la violencia machista.
Ahora surge el #MenToo para reconocer que también hay hombres que son maltratados, que también hay quienes han sido víctimas de acusaciones de violencia de manera injusta. Sí, la violencia la ejercen hombres y mujeres, pero hay circunstancias que hacen que las mujeres sean más propensas a ella, condiciones sociales y económicas que las colocan en situaciones mucho más difíciles y vulnerables que a los propios hombres.
El juicio Depp-Heard es una muestra de lo que cientos de parejas viven en lo privado y de cómo, al ser figuras públicas, de un momento a otro lo más íntimo puede volverse público. Algo que puede pasarle a artistas, deportistas y también gente de la política. Deja además a la reflexión cómo, al parecer por naturaleza humana, hombres y mujeres tienen una dosis de violencia, de enojo, de ira o rabia que, con ciertas condiciones, puede llevarla a situaciones extremas.
En cualquier caso, en tanto avancemos en aprender a resolver conflictos y diferencias de maneras no violentas, lo primordial es denunciarlo. No quedarse calladas ni callados. ¿Cuántos casos similares de violencia estarán enfrentando hoy parejas de México?