Jalisco también espía
Ni los amigos se salvan. El pasado lunes El País México dio a conocer que el Ejército Mexicano también espía las telecomunicaciones de Alejandro Encinas, subsecretario de derechos humanos, según una investigación de The New York Times.
Aunque el escándalo del espionaje por parte de los gobiernos a través de software Pegasus inició en la administración pasada, el Ejército Mexicano lo adquirió en 2019 para espiar activistas y periodistas bajo la administración de Andrés Manuel López Obrador, el mismo que negó precisamente ayer que las fuerzas armadas espiaran al subsecretario.
Pero no ha sido el único caso. En Jalisco también se espía. A inicios de 2021 la Contraloría del Estado y el Gobierno de Jalisco confirmaron que, durante la administración de Aristóteles Sandoval, se adquirió el sistema de espionaje denominado "Galileo" con un costo de 263 millones de pesos en la modalidad de arrendamiento.
Aunque las autoridades dieron a conocer el “descubrimiento” con bombo y platillo, y aseguraron que el equipo, adquirido para la Fiscalía de Jalisco, pero que al parecer habría sido utilizado por terceros ajenos, había sido resguardado y se había iniciado una investigación para conocer los fines por los cuales fue adquirido, esta administración volvió a adquirir tecnología de espionaje.
Se trata del software NEOLINX DE MEXICO, S.A. DE C.V, empresa proveedora de sistemas de espionaje que, por ejemplo, también sirvió a la Fiscalía General de la República y a estados como Quintana Roo, Campeche y Baja California, estados donde se ha denunciado espionaje.
La empresa se encuentra en estatus activo como proveedora del Gobierno de Jalisco, según confirma la Secretaría de Hacienda.
Aunque la proveedora de "Galileo" denominada Hacking Team, proveniente de Italia, ya no figura como proveedora actual, de acuerdo con El País, Neolinx es su intermediaria.
A Jalisco también le sirve actualmente NUGA SYS S.A. DE C.V., empresa dedicada a desbloquear e intervenir teléfonos celulares sin que la persona propietaria lo sepa.
La compañía, con sede en San Pedro Garza García, fue la ganadora de la venta de un "software forense" sin especificar los fines, para el Instituto Jalisciense de Ciencias Forenses, pagando 2.3 millones de pesos.
NUGA SYSTEMS también ha realizado operaciones de espionaje en Hidalgo y Baja California.
¿Para qué utiliza el Gobierno de Jalisco estas herramientas? ¿A quién espía? ¿No se supone que, si se tratara de elementos necesarios para investigaciones contra criminales, las autoridades podrían compartir sus usos públicamente?
Muchas incógnitas por resolver respecto de estos dos sistemas que sirven a entidades denunciadas a lo largo y ancho del País como vías de espionaje a personas periodistas y defensoras de los derechos humanos.
Pensando inocentemente que en Jalisco la seguridad está bajo control, que todo opera a la perfección, y que en nuestro Estado las autoridades todo lo hacen bien, no tendríamos por qué preocuparnos, pero ¿esto realmente pasa?. Perdón, pero la burra no era arisca, la hicieron.