Jalisco en la batalla de Morena
El fin de semana pasado (21 y 22 de enero) nos regaló otro episodio irrisorio sobre cómo “las corcholatas” del Presidente Andrés Manuel López Obrador continúan su abierta e ilegal competencia por la candidatura presidencial de 2024.
Desde los futbolistas que repentinamente se sintieron simpatizantes políticos a favor de Adán Augusto López en las redes sociales, hasta las inefables costureras que diseñaron y empezaron a producir los “marcelitos” del secretario Ebrard Casaubón, la carrera presidencial parece no tener margen para la mínima decencia.
Pero si el Presidente López Obrador, que todo lo tolera e incluso lo impulsa tratándose de sus amigos aspirantes, decide lo que sucede en el nivel nacional, ¿qué pasa en nuestro Estado? ¿Jalisco también se pintará de “morena”?
Calma… calma.
Es apenas la expresión de una pregunta y no una aseveración en favor o en contra. Vamos por partes.
Primero que nada: ¿qué dicen las estadísticas? La mayoría de las encuestas que le consultan a la gente, ya sea de forma presencial o por teléfono, ¿por cuál partido votaría si hoy fueran las elecciones?, responden que contundentemente la “intención de voto” es por el partido presidencial: Morena.
Sin embargo, las cosas cambian, y mucho, cuando a las mismas encuestas se les empiezan a poner nombres y rostros. Los aparentemente aborrecidos funcionarios de Movimiento Ciudadano recuperan territorio rápidamente. Personajes como Pablo Lemus, presidente municipal de Guadalajara, parecen no tener rivales de estatura suficiente si se les busca en Morena.
Una pausa: el asunto no es indagar si Lemus es malo, bueno o regular alcalde. El tema es que cuando se le confronta con algún aspirante de Morena, parece siempre salir airoso. Todo es cuestión de revisar las encuestas. Y claro, falta que haya precampañas, campañas, mítines, entrevistas y toda la parafernalia que acompaña a un aspirante a ocupar un cargo de poder. Ya llegará el momento y lo expondremos en esta Palestra 20. La pregunta ahora, dirigida específicamente para los simpatizantes, militantes y pretendientes de Morena, es la siguiente: ¿dónde están los suyos, sus candidatos?
Con toda sinceridad… ¿quién levanta la mano aparte de Carlos Lomelí, el regidor de Guadalajara, dos veces derrotado en una contienda por la gubernatura? Porque la verdad, ya no son creíbles los presidentes municipales de Puerto Vallarta, Alberto “El Profe” Michel, ni tampoco el alcalde de Tonalá, Sergio Chávez Dávalos.
El único que aparentemente toma en serio la competencia interna es el coordinador de los diputados de Morena en el Congreso del Estado, José María Martínez Martínez… tremenda ironía, porque se trata de un político de carrera que avanzó la mayor parte de su trayectoria en las filas del Partido Acción Nacional.
Apenas el domingo estuvo en Ciudad Guzmán, en una más de las muchas actividades que realiza con la militancia de Morena, y lo vocearon como “¡gobernador!”.
Para el Dr. Lomelí, el diputado “Chema” Martínez es mucho menos que un recién llegado; es casi un innombrable, y ese término tiene mucho sentido en Morena. Pero si el “Profe” Michel cayó de la gracia presidencial desde hace tiempo, “Chema” Martínez tiene una puerta abierta en la voluntad del secretario de Gobernación, Adán Augusto López. Lo más irónico del caso es que el mismo Lomelí Bolaños apostó por la misma corcholata.
No cabe duda… la política es una rueda de la fortuna. Y los morenos son tan singulares como los naranjas.