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JC Chávez, causa loable

La admiración a Julio César Chávez del aficionado al boxeo se mantiene viva. Sus presentaciones en las arenas son prueba de ese enamoramiento, se cumplen cuatro décadas. Campeonatos mundiales en los años 1980, hazañas en los 1990, y vigente a través de TV Azteca, una marca que trasciende en las nuevas generaciones.   

“El Emperador” ha llevado su marca para ayudar a familias en situación de vulnerabilidad, a jóvenes con problemas de adicción. Un gigante que llena arenas en peleas de exhibición ante el reconocido Jorge “Travieso” Arce, quienes no necesitan más que sus nombres para registrar grandes ventas de boletos, como en la época romántica del boxeo mexicano. El viernes 25 de septiembre en Tijuana, Julio César va de nuevo a encontrarse en el cuadrilátero con “Travieso en pelea de exhibición a cuatro rounds, será en streaming en vivo, a puerta cerrada, con todos los protocolos de prevención y sanidad de las autoridades de salud y de la Comisión de Box de Tijuana, y del Consejo Mundial de Boxeo.  

Accesos en superboletos.com, para esta causa loable. 

“Esperemos a que se den los tiempos”, dijo en alguna ocasión un político local. La pandemia de COVID-19 prohibió montar boxeo en Jalisco. Es difícil para los promotores locales subir a púgiles en escenarios sin público, no tienen el respaldo de la televisión, escasean los patrocinadores, la taquilla es la que ayuda para pagar la papeleta, es arriesgar capital por mera pasión, quebrarían. 

Antes de la pandemia, en los meses de enero a marzo, los empresarios cambiaron de entidad, abandonaron el parque San Rafael para llevar boxeo a Tlajomulco, Zapopan, algún obstáculo oficial les impedía arriesgar su capital en Guadalajara. Un entorno que sólo cambiaría en la siguiente administración. No falta mucho. 

Presentar a boxeadores locales en otras plazas de México, será arriesgado, ya le sucedió a David “Rino” Alegría, lo llevaron como carne de cañón a Tijuana en marzo, lo noqueó Omar Alejandro Aguilar en el primer round, ahí se acabó lo que fue una gran promesa del boxeo tapatío, que necesitaba del cobijo de las arenas de Guadalajara, del público que lo apoyaba para cosas de veras importantes. “Rino” volvió a perder en Tijuana en junio, José Guillermo Alvarado le ganó por decisión. Y por ahí estaré atisbando.

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