Iban por el “Youtuber” mejor armado de El Mencho
El comando de élite que encabeza Ricardo Ruiz Velazco, “El Doble R”, fue definido hace dos años por Luis Crescencio Sandoval, titular de la Sedena, como «la fuerza de mayor capacidad dentro del Cártel Nueva Generación con movilidad, protección blindada, poder, volumen de fuego y adiestramiento militar».
“El Doble R”, presunto causante de los bloqueos en Jalisco y Guanajuato, también es el encargado de realizar videos propagandísticos del cártel. Su clip más famoso es quizá la mayor demostración de poder de un grupo criminal en nuestra historia reciente.
El 17 de julio de 2020 (día del cumpleaños de “El Mencho”) circuló un video grabado supuestamente en Tomatlán, Jalisco, en apoyo al capo. Tres días después, durante una mañanera, el titular de la Sedena glosó las imágenes de decenas de hombres encapuchados, con vestimenta militar y en autos blindados.
«En el análisis se determina que hay 80 armas presentes, una ametralladora antiaérea calibre 50, nueve ametralladoras de otra naturaleza, 10 fusiles Barret calibre 50, 54 fusiles de asalto, seis aditamentos lanzagranadas, en total, 80 armas y 75 personas visibles en los videos (...) Tenemos además 19 vehículos que presentan características comerciales, de los cuales 12 con blindaje artesanal y siete con ajustes para montar armamento».
Potencialmente a esto se enfrentaron el Ejército y las fuerzas policiales locales este martes. Por eso el saldo blanco entre la población civil, salvo por los daños materiales, es casi un milagro.
El estudio «Jalisco: la amenaza del crimen organizado», elaborado por el Consejo Ciudadano para la Seguridad Pública y Justicia Penal A.C., enlista cuatro componentes para definir a un Estado fallido.
1) La pérdida del monopolio de la violencia por parte del Estado con el surgimiento de milicias privadas que operan cotidianamente; 2) El atentado contra agentes del Estado de alto rango y los miembros de las fuerzas del orden; 3) El cobro de rentas ilícitas a pobladores por parte del crimen; y 4) La inacción o ineficiencia de las respuesta local y federal ante el problema.
Según el estudio que data de 2015, en ese entonces se calculaban entre 300 y 400 sicarios al servicio del Cártel Nueva Generación sólo en Jalisco.
La autoridad debe actuar contra esas células criminales cada día más poderosas, no sólo contra los autores de los atentados de ayer. Las intervenciones superficiales y el esquema de podas de grupos criminales nos mantendrán en el mismo callejón sin salida en el que llevamos más de dos décadas.
Que ayer no hubiera más pérdidas de vidas humanas, como ocurrió en otras ocasiones con Elizabeth y su bebé Tadeo, no significa que no vivamos una situación cargada de riesgos con las características, parciales o totales, de un Estado fallido.