Fraudes vs asaltos
Los grandes fraudes registrados en Jalisco en 2022 llegaron hasta la Encuesta Nacional de Victimización y Percepción de la Seguridad, datos correspondientes a ese año.
Según los datos presentados por el INEGI esta semana, es más probable que en Jalisco una persona sea víctima de fraude que de un asalto o un robo, sin embargo, también es probable que esto no ocurra así en la realidad, y voy a explicar por qué.
Fraudes siempre han ocurrido, sin embargo, gracias a situaciones como las ocasionadas por AJP o Green Oceans, entre otras, las denuncias por este delito detonaron en 2022 ante la desesperación de las personas de haber perdido recursos por arriba del millón de pesos per cápita, pero también gracias a que al hacerse de conocimiento público más personas identificaron cómo operan los delincuentes quienes cometen el ilícito comprendiendo que lo que hacían no era "manejo de inversiones".
Tan solo por el caso de AJP se interpusieron más de 1200 denuncias por más de mil millones de pesos en pérdidas.
Por el contrario, los asaltos y robos a persona se han convertido en uno de los delitos menos denunciados debido, por ejemplo, a que las personas ven "pérdidas menores". ¿No conoce a usted personas víctimas de robos, como el robo de su celular o de alguna autoparte, quienes prefirieron no denunciar por la pereza de perder un día en la Fiscalía y comprar nuevamente lo perdido?
A mi hermano, por ejemplo, lo asaltaron dos veces en menos de un año camino a la escuela, y prefirió comprar otro teléfono en ambas ocasiones a denunciar por estas causas.
Las personas suelen denunciar en casos donde las pérdidas fueron grandes o donde ve mayor probabilidad de que se detenga a los culpables o donde ve que es posible recuperar lo perdido, por ejemplo, cuando los identifica, pero sabe que no corre peligro, como ocurrió en los casos de AJP y Green Oceans.
De acuerdo con los datos de la misma ENVIPE, en Jalisco en 2022 se denunciaron apenas el 13% de los delitos que ocurrieron, es decir, por cada delito registrado en las cifras oficiales hubo entre 8 y 9 que no se denunciaron.
¿Las razones? Pérdida de tiempo y desconfianza en la autoridad. La encuesta señala además una tendencia a que las personas víctimas de delito tienen miedo a que la autoridad les extorsione o sean hostiles con ellas, además de que considera los trámites son largos y difíciles, sin dejar de lado que puede tener miedo al agresor.
Todo esto es lo que lleva a que la autoridad tenga herramientas para decir que los ilícitos han bajado, pues recuerde, lo que no se nombra no existe, en esta línea, si no se denuncia no ocurrió.
Pero ¿verdad que habiendo sido víctima de algún delito, es molesto escuchar cómo es que las autoridades presumen que estamos mejor que nunca?
Una vez más, el que bajen las denuncias no significa que los delitos no se estén cometiendo, sino que hay delitos que en particular no se están denunciando.
Por ello una vez más hago la invitación a que si usted es víctima de algún ilícito lo denuncie en medida de lo posible, no importa si no son mil millones de pesos. ¿Sabía usted que puede hacerlo en línea o por correo y después solo acudir a ratificar con cita? Así nos ahorramos un día perdido en la Fiscalía.