El COVID-19 en México y la cuesta de enero
En el inicio de año estamos observando una cantidad exponencial de contagios que no se había registrado a lo largo de los 2 años que llevamos viviendo en pandemia.
En la gráfica que aparece a continuación, en la que se muestran los contagios ocurridos mensualmente desde el inicio de la pandemia en nuestro país, se observan los 3 picos que se han presentado; siendo en agosto de 2021 cuando se registraron la mayor cantidad de casos: 504,158.
Después de agosto inició un descenso gradual, hasta llegar a la cifra de 80,662 en noviembre. En diciembre se aprecia un ligero repunte, y ese mes concluye con 91,850 contagios.
Sin embargo, los pocos días transcurridos de enero indican que se está presentando un rebrote muy fuerte, al día 8 ya se habían acumulado 134,066 nuevos registros. Por lo que si esta tendencia prevalece (lo cual es altamente probable), el primer mes del 2022 romperá récord de contagios y superará la cifra de agosto 2021.
En Jalisco, como ha venido ocurriendo, el comportamiento de los contagios es similar al nacional, el pico más alto de contagios ocurrió en agosto y de ahí en adelante hay una disminución hasta noviembre y luego un ligero repunte. En la primera semana del año ya se han registrado 7,552 nuevos contagios.
Las estadísticas nos indican claramente que la situación actual sigue siendo bastante complicada, aunque los discursos oficiales parecen menospreciar a la nueva cepa de Ómicron por considerarla menos letal que las anteriores.
El que los contagios estén creciendo tanto, obedece precisamente a que la variante Ómicron es mucho más contagiosa que las variantes anteriores; sin embargo, los decesos crecen a un ritmo muy inferior, lo cual se asocia a que cerca de la mitad de la población mayor de edad ya ha recibido la vacuna. No obstante un crecimiento desmedido provocará inevitablemente saturación de servicios médicos, aunque el virus sea menos letal.
Adicionalmente, existe otro factor en México que conduce al subregistro de contagios: no se están realizando suficientes pruebas diagnósticas dada la escasez de las mismas y la consecuente saturación de los puntos que las realizan. Si a lo anterior agregamos que quienes se realizan la prueba y tienen resultado positivo, no llegan a saber si están contagiados de Alfa, Delta u Ómicron, seguiremos dando palos de ciego.
Por lo anterior, es un grave error el asumir que todos los contagios actuales corresponden a Ómicron, que por ser menos letal y por haber recibido la vacuna, ya se pueden relajar las medidas preventivas.
Habrá que esperar lo que ocurra en los meses por venir, y mientras prevalezcan los contagios y las mutaciones de cepas, no debemos bajar la guardia, tenemos que seguir cuidándonos y cuidando a los demás.
Para finalizar y retomar el tema del subregistro de contagios:
El portal informativo del Gobierno Federal documenta al 8 de enero, 171,461 casos acumulados en el estado de Jalisco. El portal del Gobierno Estatal reporta 401,794 en la misma fecha. La diferencia es de 138 %, y supuestamente obedece a que en Jalisco se cuantifican las pruebas elaboradas en laboratorios privados y en los reportes del Gobierno Federal no se incluyen.
La estadística nacional reporta al 8 de enero 4’113,789 casos confirmados. ¿Cuántos habrá en realidad?........¡Usted calcúlele!