El 5 de octubre
Hay fechas que se graban en la memoria de todos porque están relacionadas a acontecimientos o celebraciones de alto impacto. En consecuencia, la gente sabe qué se celebra el 6 de enero, el 14 de febrero, el 21 de marzo, el 10 de mayo, el 16 de septiembre, etc.
Por más de doscientos años, prácticamente desde 1734, para Guadalajara y su región, el 5 de octubre era una fecha emblemática por una singular razón: en ese día tenía lugar la “llevada de la Virgen” a su santuario de Zapopan. Desde el día anterior toda la ciudad se paralizaba en espera y preparación de un sencillo acto que con el tiempo se fue volviendo complejo en su significado y muy rico en sus variadas expresiones.
Y si el 13 de junio comenzaban las lluvias, llueva o no llueva, porque ese día llegaba la Virgen a la ciudad, el 5 de octubre terminaban las lluvias, aunque siguiera lloviendo, porque ese día regresaba la Virgen a Zapopan.
Así fue que, en la memoria colectiva, el 5 de octubre quedó fijo como el día de llevar a la Virgen. Durante un periodo de casi setenta años, (1867-1930) las autoridades políticas y por un tiempo también las eclesiásticas, buscaron la manera de poner fin a esta gran manifestación religiosa y cultural, acudiendo al expediente de regresar la imagen de la Virgen en privado y cambiando la fecha, aun así, la sociedad tapatía mantuvo la romería del 5 de octubre, con o sin la célebre imagen, de tal modo que en ese día desde la madrugada se cubría el antiguo camino de los “Colomos” de miles de personas que acudían en peregrinación a Zapopan, aunque las autoridades las privaran de la presencia de la Virgen.
En estos dos años de pandemia sucedió lo contrario, se mantuvo la llevada de la Virgen, pero sin asistencia de fieles, que en masa estrenaron la experiencia de lo que se llamó “romería virtual”.
La fecha tradicional y centenaria comenzó a pasar a la historia a partir de que un columnista de este periódico, fundado precisamente un 5 de octubre, sugiriera en 1942, que dicha celebración se tuviera en domingo, sugerencia aceptada que se mantuvo de 1943 a 1952, en el primer domingo después del 5 de octubre.
1952 fue una fecha célebre, en ese año se inauguró el eje Alcalde - Ávila Camacho, construido exprofeso para la gran romería de Zapopan, y al año siguiente se estableció una nueva fecha para llevar a la Virgen, que no sólo se volvió rápidamente emblemática, sino que puso en verdadero olvido lo que anteriormente evocaba: el 12 de octubre.
En efecto, poco importa hoy a la comunidad regional la llegada de Colón a las Bahamas, el 12 de octubre es el día de la romería, fiesta que nuestra gente ha construido, defendido y sostenido por ya 288 años.
Justamente, uno de los aspectos que llamaron especialmente la atención del comité de la UNESCO a la hora de analizar si esta celebración merecía o no el galardón de “Patrimonio de la Humanidad”, fue precisamente lo que hoy se llama “resiliencia”, que en términos inteligibles y, sobre todo, pronunciables, significa su capacidad histórica para mantenerse a pesar de todo tipo de retos y adversidades.