Diario de un espectador
Atmosféricas. Una plegaria urbi et orbi. Un soneto impecable de Jorge Esquinca dedicado a una pieza maestra de Alberto Kalach (ese artista conceptual), que concilia la Virgen de Guadalupe con la Ménora, el candelabro judío. Mantra contra la peste. Abrazos para todos.
para Alberto Kalach, que las reunió
En la suave penumbra que la mece,
Nuestra Señora luce nuevos brazos.
Siete son, más los suyos, suman nueve:
cábala del Dante. Un incierto trazo
que viene de antes y estaría luego.
Siete luces prendemos al nombrarla,
en nueve flamas mora el dulce fuego
de la unión, que se enciende al abrazarla.
Así, luminosamente escondidos,
cambiamos las espadas por aceite
-santo y seña del Verbo prometido-
y hallamos otra faz en la Madonna:
lámpara de un misterio que resuelve
candelabro y pasión en una sola.
jpalomar@informador.com.mx