“Cómo hacer cócteles con tequila”
La bebida espirituosa más vendida en México también puede ser divertida, el tequila no sólo se toma derecho; descubre aquí varios tips de coctelería
Aunque una de las formas más comunes de beber tequila es derecho, también, tenemos decenas de recetas desde la clásica paloma, la margarita, el vampiro, entre otros, pero más que explicar recetas lo que vamos a comentar es cómo crear nuestras propias “fórmulas” tomando en cuenta las características de cada categoría de tequila y con qué mezclarlo de acuerdo a las notas de las materias primas.
Siempre consideraremos tres cosas principalmente: las densidades, la complementariedad y la temperatura ambiente.
Entonces, si vemos el tema de las densidades, en nuestro cóctel siempre pondremos primero el tequila, después el hielo, luego los mezcladores, donde primero pondremos el líquido más ligero y encima el más denso, con esto incluso no necesitaremos agitar la mezcla, debido a que el líquido más pesado (denso) por la gravedad tenderá a bajar logrando un cóctel bien hecho que además nos ofrecerá en cada sorbo sabores distintos, haciendo menos aburrido el trago. Un ejemplo simple: con un tequila reposado con agua mineral y refresco de cola (campechano) se servirá el tequila, luego el hielo, después el agua mineral y al final el refresco; cuando las densidades son iguales entonces si se necesitará agitar la mezcla.
Después, veamos cómo maridar respecto a la categoría. Los tequilas blancos siempre se acompañarán, principalmente, con refrescos de frutas, jugos naturales tanto de frutas (el limón es gran protagonista) como de verduras (por las características frutales y herbales de este tipo); los reposados se acompañan más con refresco de cola, sangrita, clamato, mezclas de jugo de toronja y licores. Si son reposados ligeros son muy parecidos a las mezclas de tequilas blancos, si son reposados con más tiempo en barrica, serán más parecidas las recetas a los añejos, éstos ya podemos verlos más con mezclas con refresco de cola, chocolate, café, licores espesos, hierbas intensas, entre otros. Luego, los tequilas cristalinos, que al ser mucho más suaves y ligeros, requerimos combinaciones con jugos, cerveza de jengibre, agua quina, hierbas frescas suaves y que la carga de frutas sea mínima, en pocas palabras que todo sea suave, ligero y fino, sino perderíamos la nota del tequila.
Todas las recetas se aligeran (respecto a dulzura, amargura, acidez) y se complementan con agua con gas y ginger ale al gusto.
También, podemos agregar salsas picantes y/o condimentadas, así como esencias y zumos para dar el toque fino y personal a nuestra creación, para esto vamos creando e iremos probando, al fin es nuestra personalidad expresada en una bebida.
En cuanto a la temperatura ambiente, obvio a más calor más hielo y menos intensidad de sabores dulces, ácidos, salados y amargos; también, recomiendo enfriar previamente el vaso para tener mayor control del producto final.
¡Adelante… El tequila está listo para combinarse!
Muchas Gracias