¿Colapso Fosfo del eje Jal-NL?
Lejos parecen haber quedado aquellos momentos de apapachos y elogios mutuos que se lanzaban en sus inicios como gobernador de Nuevo León en el 2022, Samuel García, y el gobernador de Jalisco, Enrique Alfaro, entonces ya en su cuarto año.
Era cuando el joven político regio venía a Jalisco para llevarse ideas de Gobierno. O cuando los de aquí viajaban a Monterrey. Recuerdo, por ejemplo, al que fue también el entonces alcalde de Guadalajara, Pablo Lemus, y estuvo como anfitrión su homólogo Luis Donaldo Colosio Jr. Todos empoderados, anunciaban el Eje Jalisco-Nuevo León.
Iba todo viento en popa en el partido Movimiento Ciudadano (MC), de Dante Delgado. Hasta se autollamaban el partido de la “alegría” y se jactaban de gobernar dos de los Estados, y sus capitales, más importantes del país. Aquel acto fue atestiguado por la clase empresarial neoleonesa y jalisciense, esperanzados también de que el movimiento naranja siguiera creciendo y contribuyera a ser un factor para fortalecer la oposición y frenar a la 4T.
La primera decepción para la iniciativa privada de Nuevo León y de Jalisco fue que MC no se hubiera unido al PAN-PRI-PRD para formar un frente único contra Morena y aliados en la próxima elección presidencial.
Ahora tendrán que revisar si las diferencias políticas que ayer se hicieron públicas, pero que empezaron a surgir desde junio pasado, entre Alfaro y Samuel, no dinamitan también aquel Eje Jalisco-Nuevo León, que les prometieron en mayo de 2022 para facilitar sus inversiones y el pago de impuestos a dichos Estados y no a la Federación amlista.
Y es que ayer, pese a que ha afirmado una y otra vez, que desde junio pasado que declinó buscar la candidatura presidencial (que siempre le negó el dueño de la franquicia naranja), se retiró de la vida política electoral, Alfaro cuestionó que García tuviera el liderazgo naranja para destapar a Jorge Álvarez Máynez, como candidato presidencial emecista.
Con razón reprobó las “ocurrencias y banalidad” por la forma en que el fallido candidato presidencial “Fosfo-fosfo” y su esposa la influencer Mariana destaparon a su compadre zacatecano y líder de la bancada emecista en San Lázaro, en medio de la botana y las micheladas con cervezas “Carta Blanca”. “Esa no es política (…) se han hecho las cosas muy mal” y “lo que está pasando a nivel nacional lastima nuestro proyecto en Jalisco”, sentenció ayer en entrevista en su acostumbrado tono.
Ese peculiar destape de la “generación equivocada” que efectivamente, como señala Alfaro, podría afectar la causa emecista en Jalisco, fue avalado por Dante. Es más, también por Lemus, el candidato a la gubernatura de Jalisco por MC, y por su aliado político de siempre, el senador Clemente Castañeda, que estuvieron ayer en la Ciudad de México y subieron al escenario donde le levantaron las manos a quien será el candidato presidencial naranja.
Pero la pregunta importante es si colapsará el Eje Jalisco-Nuevo León. O en su caso, si alguna vez de verdad funcionó o fue sólo propaganda política de los tiempos dorados emecistas.
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