Charros y el riesgo de quedar fuera de Playoffs
En la parte final de la segunda vuelta de la agenda ordinaria de la actual temporada 2022-2023 de la Liga Mexicana del Pacífico (LMP), se vislumbra una cerrada lucha por quiénes lograrán colarse a la Postemporada en busca del anhelado título ocupando los espacios séptimo y octavo, porque hay que recordar que de los 10 equipos que componen el certamen, se eliminan dos y los ocho que califican son los protagonistas de una etapa en la que cualquiera puede llegar a ser campeón, no obstante hayan logrado pasar la aduana y estar en los Playoffs como parte de los conjuntos que mejor lucieron y obtuvieron más fácilmente su pase a finales o sean de los que, por su irregular desempeño, como es el caso de Charros de Jalisco y otros dos o tres escuadrones que han tenido una actuación plena de claroscuros o altibajos, tienen más posibilidades de fracasar que de inscribirse entre los que jugarán en las series posteriores a la agenda ordinaria, ya que como sabemos, el sistema de competencia es bastante alcahuete y permite que aun pasando “de panzazo” cualquier novena que logró estar en Playoffs tenga la opción de campeonar y de ese tipo de historias hay muchas.
Y es que debemos recordar que la calificación a Postemporada se resuelve a partir del acomodo como les resulta en la tabla de medición por puntos acumulados sumando los obtenidos en cada una de las dos vueltas del calendario ordinario, debiendo tomarse en cuenta para el caso de requerirse desempates, los criterios claros existentes, como son la dominancia entre equipos y los temas relativos a las diferencias entre carreras anotadas y las recibidas y otros parámetros que permiten sea indubitable definir quiénes ocupan las posiciones del uno al ocho y sean los actores de la gran fiesta de temporada.
Lo cierto es que la actual campaña ha sido una de las peores en cuanto al desempeño y resultados que hasta ahora han tenido los Charros jaliscienses a partir de la primera, es decir, la 2014-2015, cuando llegaron a la LMP, ya que desde entonces y hasta la temporada 2020-2021 ya con nueva directiva, lograron un título, un subcampeonato y salvo un fracaso al no poder calificar a Postemporada más en condiciones menos vergonzosas que las actuales, cada campaña dieron satisfacciones a su fanaticada que les apoyó crecientemente, siendo desde luego importante el contraste entre lo ocurrido el año pasado, con los actuales dueños, que cosechando lo sembrado antes, pero sin mostrarse como un equipo apabullante, vinieron de menos a más y supieron encontrar la ruta para coronarse campeones, estando el caso actual de que, faltando solo 15 juegos por desahogar a partir de la serie que inician mañana, los albicelestes sufren de escaso apoyo del público y por un desempeño muy irregular y lastimoso han estado peleando casi todo el certamen ordinario por abandonar el sótano o el penúltimo lugar y están en severo riesgo de fracasar al quedar fuera de la Postemporada.
Tras perder la última serie desahogada en gira a Mexicali, enfrentan a partir de hoy una peligrosa aventura al visitar a los Algodoneros en Guasave, estando obligados a traerse un par de triunfos para enfrentar en mejor disposición a la tropa de Culiacán a la que reciben del viernes 16 al domingo 18, y después marchar con renovado optimismo a visitar y vencer a Sultanes en Monterrey, siendo estos tres equipos los que disputan permanecer en el grupo de calificables a Playoffs ocupando los escaños séptimo u octavo.
Charros requiere pues, la conjunción de enjundia y pasión en el desempeño de sus peloteros pero también necesita que directiva y cuerpo técnico generen estrategia y decisiones adecuadas para triunfar en al menos nueve de los 15 cotejos que restan y así evitar el vergonzoso fracaso.
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Salvador Cosío Gaona