Campañas políticas: el futuro de la ciudad
Durante dos meses a partir del domingo pasado, casi una treintena de equipos de campaña trabajan a marchas forzadas para tratar de ganar una de las presidencias municipales en el Área Conurbada de Guadalajara. Como es natural, la atención se enfoca en municipios históricos como Guadalajara o Zapopan, pero justo los equipos de campaña, al tiempo que impulsan a su candidato o candidata, estarán completando la proyección del futuro que vivirán los habitantes de esta gran urbe en los siguientes años.
Parecerían temas sin conexión, pero lo que se decida en Zapotlanejo o en Ixtlahuacán, en El Salto y en Juanacatlán, moldeará la forma de vida para los habitantes de la ciudad. Un ejemplo claro y a la mano: si efectivamente se incrementa el transporte masivo desde Tlajomulco y del resto de la ciudad hacia allá, cientos de miles de personas que se mueven todos los días, ganarán en recursos vitales como tiempo, salud y recursos económicos. Lo mismo puede suceder si en cumplimiento de los compromisos que han hecho varios candidatos, aumenta y mejora el transporte masivo desde y hacia Tonalá, un municipio que por cierto, ha sido inexplicablemente ignorado en este tema durante al menos 20 años.
Y lo mismo puede concluirse si se revisan propuestas para corregir la problemática en el manejo de la basura, en el tratamiento y distribución del agua potable o en el alumbrado público. Mejorar esos servicios, no es sólo una oferta de campaña. Puede contribuir significativamente a mejorar la condición de salud de amplios grupos de población que justo padecen las consecuencias de malas medidas aplicadas en zonas de la ciudad donde hay más recursos o bienestar. Hay que decirlo: no es lo mismo que falta el agua en las Mesas Coloradas que en las zonas habitacionales de Avenida Acueducto.
O bien, no se percibe igual el daño por el mal manejo de la basura y los residuos en centro de Tlaquepaque o en los fraccionamientos edificados junto al camino que conduce a Matatlán, en Tonalá.
Y está también el tema fundamental de la seguridad.
Todos tenemos pruebas de que las balaceras, los homicidios y los riesgos, ocurren con toda su crudeza, igual en el entorno de centros comerciales de máximo lujo, como el del cruce de las avenidas Patria y Acueducto, en Zapopan, que en las calles de barrios como San Juan Bosco o Talpita, en Guadalajara.
En términos de inseguridad y violencia, las consecuencias negativas son percibidas y golpean a todos los grupos de población.
¿Qué proponen candidatos y candidatas que aspiran a ser alcaldes?
En apariencia, sus discursos son inmediatistas y están plagados de promesas.
Pero hay que buscar debajo de la superficie. Revisar cómo conciben los problemas y las soluciones potenciales.
Para la mayoría de las personas, el período de campañas electorales es más una molestia que una oportunidad. Pero es justo el período en el que se debe tomar nota de qué propuestas presentan quienes aspiran a gobernar.
La mayoría de los problemas más graves que hoy se padecen, resultan de las malas gestiones de quienes no supieron gobernar antes y fallaron a sus compromisos.
El futuro inmediato (seis o 10 años) de la ciudad, y la calidad de vida que se pueda ofrecer a quienes ya viven aquí y a quienes seguirán llegando, depende de que lo que se decida en el proceso electoral de este año. De ese tamaño.