Ideas

Arum va en serio

El poderoso promotor y presidente de Top Rank, Bob Arum, engorda su nómina, ahora firma al colombiano Eleider Álvarez, campeón mundial semicompleto OMB, con el objetivo de conquistar la fama del boxeo mundial en 2019.

El sudamericano, con registro de 24-0 y 12 nocauts, se une a Vasiliy Lomachenko y Terence Crawford, conformando una unidad que golpee a ''Canelo'' para hacerse de alguna rebanada del pastel de los millones de dólares.

Eleider noqueó en siete rounds al ruso Sergey Kovalev, la revancha será el 2 de febrero en Frisco, Texas, fecha en la que arrancará en la dirección del colombiano el abogado egresado de Harvard, y quien debió encontrarle algo superlativo al campeón mundial semicompleto.

El tapatío Abner Mares va tras su cuarto campeonato mundial en diferente categoría, desafiará a Gervonta Davis, titular superpluma AMB, el 9 de febrero en Carson, California. El estadounidense llegará con el inmaculado 20-0 con 19 nocauts, y aunque en su listado no se leen nombres prestigiosos, cimbra el palmarés, más con el recuerdo de Mares buscando la vertical después del ferrocarril que lo aplastó en 2013, el KO que le propinó Jhonny González, así como las dos derrotas ante el tirapiedras Leo Santacruz, quien frenó al jalisciense en las dos oportunidades para consagrarse con un cuarto campeonato mundial en diferente división. Santacruz mantuvo siempre ante Mares la diferencia a su favor por su mayor estatura y alcance, y talla con la que también tendrá problemas frente a Gervonta, es más alto que el mexicano.

Mares, como Óscar Valdez, se equivocó en resolver sus peleas, aprendió la técnica en el terreno olímpico y la echó al basurero en el profesional, para convertirse en boxeador de choque. Pudo haberse erigido en un actor cerebral con el nocaut como su gran vendedor, en boxeador completo, como los que hoy podemos seguir a través de la Internet, los históricos que construyeron los cimientos del boxeo nacional, esos de exhibiciones electrizantes que levantaban de la butaca al aficionado.

Óscar Valdez prefirió el boxeo pedestre, como Mares, quiere el choque con el adversario, así Scott Quigg le fracturó el maxilar inferior en marzo, y aunque el británico no aprobó el examen en la ceremonia de peso, Valdez y su equipo decidieron que había pelea, y continuaron, hasta conseguir el resultado que alejó de los cuadriláteros al oriundo de Nogales, Sonora.

Valdez ya dijo que continuará con su estilo de boxeo, será pues castigado. Es campeón mundial pluma OMB, arriesgará ante Carmine Tommasone el 2 de febrero en Frisco, Texas, respaldo de la Eleider Álvarez-Sergey Kovalev… Y por ahí estaré atisbando.

Síguenos en

Temas

Sigue navegando