Apostar por la protección de nuestros datos personales
Los Derechos Humanos de Tercera Generación comenzaron a conceptualizarse en la década de los 70s y están basados en una serie de valores que conciben a la humanidad como un todo, sin diferencias, con necesidades semejantes y anhelos compartidos. Dentro de estos se encuentran derechos tales como el derecho a la identidad nacional y cultural, a la preservación de la flora y fauna, al cuidado y fomento del arte y la cultura y a la libre determinación de los pueblos. Entre estos derechos también se encuentra un derecho importantísimo para todos nosotros como individuos: el derecho a la protección de nuestros datos personales.
Aunque la protección de datos inicialmente fue poco reglamentada, en la última década nuestra información ha cobrado una relevancia social y económica importantísima, relacionada particularmente con la evolución de los medios digitales, lo que ha obligado a todas las organizaciones, empresas y gobiernos que resguardan datos personales a revisar sus políticas y procesos respecto del tratamiento de estos.
Por esta razón, y con la finalidad de homologar criterios legislativos para darle un extra a la protección de nuestros datos personales en posesión del sector privado, el día de ayer presenté ante el Senado de la República tres iniciativas que nos ayudarán a salvaguardar mejor nuestra información y obligarán a quienes la resguardan a hacer lo mismo.
La primera tiene por propósito el homologar los criterios de los sujetos obligados y particulares respecto al ejercicio de los derechos de acceso, rectificación, cancelación u oposición al tratamiento de datos personales, por parte de las personas que acrediten tener un interés jurídico y legítimo a nombre de personas fallecidas o a nombre propio. La segunda obligará a los responsables del resguardo de nuestros datos personales a notificar, tanto a los dueños de la información como al Instituto Nacional de Transparencia, Acceso a la Información y Protección de Datos Personales, en un plazo no mayor a 72 horas sobre cualquier filtración o vulneración en sus bases de datos, para poder tomar las medidas necesarias como: cambio de contraseñas y cancelación de tarjetas, disminuyendo los daños en nuestro patrimonio, seguridad, libertad o vida. Por último, la tercera iniciativa aplicará la normatividad en materia de protección de datos personales en el sector privado para proteger nuestros datos a nivel transnacional, y evitar que se repitan eventos donde privados descuidan la información de las y los mexicanos que alojan en bases de datos en el extranjero.
Estas propuestas tienen un solo fin y es que, en este mundo cada vez más digitalizado y global, podamos seguir siendo dueños de nuestra información más privada y que nadie más que nosotros pueda consentir compartirla. Mientras Morena y sus aliados pretenden vulnerar la protección de los datos personales de las y los mexicanos, a través de la recolección innecesaria de nuestros datos biométricos, nosotros apostaremos siempre por la protección de los derechos humanos.