Ideas

- Visita presidencial

Ayer, por alguna travesura de “los duendes de la Redacción” -invencibles razones de espacio, quizá-, se quedó en el tintero el colofón del texto del día, alusivo al combate frontal del gobierno norteamericano a las organizaciones delincuenciales que, desde México, afectan a ciudadanos e instituciones estadounidenses: “Es penoso -decía el omitido colofón-, pero hay indicios de que en otros países se trabaja más intensamente que en México, para combatir a los delincuentes... mexicanos”.

-II-

La reflexión, crítica o como quiera denominarse, viene a cuento porque en la visita del Presidente López Obrador a Jalisco, hoy, está programado -según anticipó el gobernador Enrique Alfaro- “hablar sobre seguridad y los temas pendientes” (abasto de agua, saneamiento del Río Santiago, los proyectos de la Línea 4 del Tren Eléctrico Urbano y las laterales del Periférico de Guadalajara, etc.).

En el tema de la seguridad, según el propio gobernador, “traemos un diagnóstico que ha construido la mesa de seguridad”. Un diagnóstico elaborado -vale suponer- a partir tanto de los frecuentes homicidios dolosos y hallazgo de fosas clandestinas como de la desaparición de personas en la entidad, a los que se suma el nuevo episodio de violencia de la noche del domingo, en que “hombres fuertemente armados de dos grupos rivales” se enfrentaron a tiros en los poblados de Apulco, Zacatecas, y Huejotitlán, Jalisco; enfrentamiento en que también participaron elementos de la Guardia Nacional y el Ejército.

-III-

Ocasionalmente, como ocurrió la semana pasada en la céntrica colonia “Jardines Alcalde”, en Guadalajara, Zapopan y demás municipios conurbados se realizan espectaculares “operativos” que se resuelven, según los boletines oficiales, con la detención de alguna(s) persona(s) vinculada(s) con la delincuencia organizada o relacionada(s) con episodios como la reciente privación ilegal de la libertad de dos elementos de la Secretaría de Marina, supuestamente como represalia por la detención de una persona vinculada con los mandos de un cártel delincuencial.

Sin el aparato de los tiempos en que se tapaban los baches, se empastaban los jardines y se colocaban carteles (“Jalisco lo recibe de pie y trabajando, Señor Presidente”) en los postes de las calles por las que circularía “la comitiva presidencial”, cabe esperar que de la visita programada para hoy se deriven, más allá de la verborrea, acciones concretas que permitan, primero, prevenir (evitar, pues) nuevos delitos, y segundo, esclarecer y sancionar al menos algunos de los que hasta ahora parecen interesar menos a las autoridades mexicanas que a las de otros países.

jagelias@gmail.com

Síguenos en

Temas

Sigue navegando