Ideas

- “Mal empieza…”

¿Era, realmente, el periódico de la fecha que constaba debajo del cabezal? Porque no parecía. “Domingo 2 de septiembre de 2018”, y no estaba ni la fotografía del Presidente (Peña Nieto todavía, aunque hay quienes juran que ya es López Obrador), ni, debajo o al lado, el titular que etiquetaba de “Realista, Progresista y Patriótico” (o, si se prefiere, “Patriótico, Progresista y Realista”, que, como dijera el pariente, “el orden de los faroles no altera la luz”) al Informe de Gobierno: la obligada nota “de ocho columnas” del día.

-II-
Cambian los tiempos, cambian las costumbres. En vez de la tradicional en una fecha como la señalada, al lado de la nota más llamativa del día (“Roban una carroza con todo y difunto en Tlaquepaque”) y de otra en que el Presidente electo exhortaba comedidamente a los integrantes del “honorable” Congreso de la Unión a trabajar “en armonía” (“como personas civilizadas y no como lo que somos”, diría el pariente aludido en el párrafo anterior), aparecía la crónica de la primera sesión plenaria de la claque (“horda”, decían otras notas) que teóricamente representa al pueblo: un relato pormenorizado de actitudes, berridos, consignas, dimes y diretes e intercambio de epítetos (“asesinos”, “corruptos” y “mentirosos” serían algunos de los publicables) con que se retrataron, de cuerpo entero, impúdicamente, los unos a los otros y todos a sí mismos, los ciudadanos supuestamente elegidos por sus compatriotas para participar, en su honrosa representación, en el ejercicio de Gobierno por los próximos tres años.

-III-

Dos meses exactos han transcurrido desde las elecciones, y, al parecer, no han sido suficientes para que los actores de la nota de referencia rumiaran y digirieran las lecciones que pretendió dejar aquella jornada: que los ciudadanos mexicanos se pronunciaron por un cambio; que su demanda principal consiste en que quienes participan en las acciones de Gobierno, desde cualquier trinchera, asuman una actitud digna de la encomienda que el pueblo les asignó, y respetuosa de quienes piensan diferente o se identifican con ideologías distintas a la suya; que fueron llamados a participar en la construcción de un país mejor -más sano, más educado, menos pobre, menos violento, menos injusto…- para la mayoría de sus compatriotas que precisamente de eso piden su limosna (metafóricamente hablando), y no para reeditar, empeoradas y aumentadas, las prácticas que caracterizaron, para vergüenza del pueblo, las mal llamadas prácticas parlamentarias.

Por lo pronto, “mal empieza la semana para el que ahorcan en lunes”.

Síguenos en

Temas

Sigue navegando