La bebida de chía y linaza que ayuda a bajar la presión arterial
Debido a su alto contenido en Omega-3, fibra, grasas beneficiosas y antioxidantes, la chía y la linaza son audaces auxiliares para evitar complicaciones cardíacas
La chía y la linaza son dos pequeñas semillas que resultan ser un poderoso dúo en la batalla contra la hipertensión arterial y el colesterol alto, pues cada una es rica en Omega-3, fibra y antioxidantes, aquí te diremos de qué forma se pueden combinar en una bebida para cuidar de tu salud.
La hipertensión se da cuando las arterias se hacen rígidas e impiden el flujo de sangre, lo cual ocasiona que el corazón realice un gran esfuerzo para bombear la sangre. Si no se controla se corre el riesgo de padecer infartos, insuficiencia cardíaca, embolia o arritmia.
Según la Secretaría de Salud, se estima que en México más de treinta millones de personas padecen hipertensión arterial causada principalmente por la obesidad, la diabetes, el sedentarismo, el consumo de tabaco y alcohol.
De acuerdo con Medline Plus, las semillas de chía son una excelente fuente de fibra, grasas beneficiosas y antioxidantes, perfectas para combatir el daño celular. Tan solo una cucharada de estas semillas aporta el 20% de la ingesta diaria recomendada de fibra, destaca.
Aunado a ello, existe una bebida para bajar la presión arterial, el colesterol y los triglicéridos; además de que sus ingredientes son fáciles de conseguir, además de tener un costo asequible que se puede adaptar fácilmente a cualquier presupuesto.
Ingredientes:
- Chía
- Linaza
- Agua caliente
Preparación:
- Colocar por la noche una cucharada de chía y otra de linaza en un recipiente con dos litros de agua caliente y dejar reposar durante seis horas.
- Se recomienda tomar esta bebida por las mañanas, ya que al estar en ayunas tu organismo absorberá rápidamente todos los nutrientes de las semillas.
Si quieres enriquecer algún jugo o licuado con las bondades de la chía o la linaza, recuerda que la clave al preparar cualquier bebida con ellas, al ser semillas difíciles de digerir, consiste en dejarlas remojando algunas horas y así activar todas sus proteínas, para luego proceder a triturar las semillas en la licuadora en incorporar a cualquier preparación.
CT