¡Atento! Estas son las primeras señales de artritis

No hay nada de raro en sentir un dolor ocasional en las articulaciones. A veces, aparece una sensación incómoda en las uniones de nuestras extremidades que después de un tiempo desaparece. Sin embargo, si esta sensación se vuelve habitual y en particular si el dolor se encuentra específicamente en la articulación, puede que se trate del inicio de esta enfermedad. Bajo el concepto artritis se incluyen más de cien trastornos que afectan distintas articulaciones y tejidos.

Como todas las enfermedades, un diagnóstico a tiempo es esencial para comenzar el correcto tratamiento de la enfermedad. Estos siguientes síntomas específicos pueden anticipar la aparición de la artritis:

Dolor en una articulación. Una molestia ubicada en una articulación que crece en dolor de forma gradual con el tiempo puede tener cierta relación con los principales tipos de artritis. Sin embargo, si se realizó alguna actividad que involucre la flexión y uso de articulaciones puede que solo sea un malestar temporal.

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Hinchazón y sensibilidad en articulaciones. La forma de revisarlo es poniendo un poco de presión en la articulación y revisando si existe dolor o hinchazón.

Rigidez. Un estado de poca soltura que dure más de 30 minutos puede ser un síntoma temprano de esta enfermedad.

Sensación de chirrido. Esa extraña sensación de que a tu articulación le hace falta aceite para poder realizar los movimientos puede que sea una señal de que el cartílago se ha desgastado por artritis.

Si el dolor se presenta de forma simétrica en el cuerpo, puede que estés sufriendo de artritis reumatoide, ya que esta se presenta en ambos lados del cuerpo. Es decir que, si te duele la muñeca derecha, la sensación también se presentará en la izquierda. Y así será para cualquier articulación lastimada.

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Otros síntomas relacionados con la artritis pueden ser:

• Fatiga
• Fiebre
• Pérdida de peso
• Enrojecimiento y calor
• Entumecimiento y hormigueo

Esta enfermedad no tiene cura, pero hay medidas para disminuir el dolor y la rigidez. Los profesionales que pueden diagnosticar y proponer un tratamiento especial son un reumatólogo, un especialista en medicina del deporte, un ortopeda o un podólogo. El tratamiento puede ser desde una combinación entre rehabilitación física y medicamentos tomados o tópicos, hasta cirugía en casos graves que requieran el reemplazo de la articulación.

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OB 

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