¿Para qué sirve el té de orégano?
Además del uso de medicamentos, el orégano se puede convertir en un aliado a la hora de bajar los niveles de glucosa en sangre
El orégano es una planta que comúnmente usamos en nuestra vida diaria como condimento en una gran variedad de platillos. Su sabor característico es indispensable en pizzas, pastas o en el tradicional menudo. Sin embargo, lo que muchos desconocen es que el té de orégano ofrece numerosos beneficios para la salud.
¿Quieres saber cuáles son estos beneficios y cómo prepararlo? Descúbrelo a continuación.
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El té de orégano ofrece varios beneficios para la salud que pueden contribuir al bienestar general. A continuación te compartimos sus principales propiedades:
- Mejora la digestión: El té de orégano estimula la producción de jugos gástricos y ayuda a reducir los espasmos musculares, lo que mejora la digestión y alivia problemas como el exceso de gases y los cólicos intestinales.
- Efecto diurético: Esta infusión actúa como un diurético natural, ayudando a eliminar el exceso de líquidos y toxinas del organismo. Esto puede ser beneficioso para quienes buscan perder peso o prevenir la retención de líquidos.
- Control del apetito: El consumo de té de orégano puede tener un efecto saciante, lo que ayuda a reducir el apetito y evitar picoteos innecesarios durante el día.
- Propiedades antioxidantes: El orégano contiene compuestos como el carvacrol y flavonoides, que poseen propiedades antioxidantes y antiinflamatorias, protegiendo las células del daño oxidativo y contribuyendo a la salud general.
- Regulación del azúcar en sangre: Este té puede ayudar a equilibrar los niveles de glucosa en sangre al bloquear ciertas enzimas involucradas en el metabolismo de la glucosa, lo que es útil para controlar la diabetes y la prediabetes.
- Alivio de dolores: Gracias a su contenido de carvacrol, el té de orégano puede ayudar a aliviar dolores abdominales, dolores menstruales y otros tipos de malestar físico.
- Mejora la salud respiratoria: Se ha utilizado para tratar trastornos respiratorios como el asma y la bronquitis, gracias a sus propiedades antimicrobianas.
Es importante resaltar que el té de orégano no debe sustituir tratamientos médicos convencionales y se debe consultar a un profesional de salud antes de iniciar cualquier régimen nuevo, especialmente para personas con condiciones específicas como la diabetes o durante el embarazo.
¿Cómo preparar té de orégano ?
- Pon a calentar la cantidad de agua que vayas a utilizar en una olla o cacerola.
- Una vez que el agua esté hirviendo, añade una o dos cucharadas de hojas de orégano, lo puedes usar fresco o seco.
- Deja hervir la mezcla durante aproximadamente 3 minutos.
- Retira del fuego y permite que la infusión repose durante al menos 5 minutos. Si prefieres un sabor más intenso, puedes dejarla reposar hasta 10 minutos.
- Cuela el té para eliminar las hojas de orégano y sirve caliente.
Es recomendable preparar solo la cantidad que se va a consumir en el momento, ya que el té puede perder sus propiedades si se guarda por mucho tiempo. Se sugiere no exceder las dos tazas diarias para evitar posibles efectos secundarios como náuseas o malestar estomacal.
Recuerda consultar con un profesional de la salud antes de hacer cambios importantes en tu dieta o incorporar nuevos remedios naturales, como el té de orégano.
FP