Mazda 2 Carbon Edition: Ahora es una compra racional
El modelo agrega elementos de seguridad como control de luces automáticas, monitor de punto ciego y asistencia de frenado inteligente
Poco a poco la seguridad se ha apoderado del portafolio de Mazda, incluyendo en las opciones de entrada, como con el nuevo Mazda 2 CarbonEdition. Es la versión más equipada del coche de enfoque citadino, pero esta vez con una serie de asistencias al conductor que lo vuelven más recomendable.
Sí, puede que los nipones llegaran tarde a esta “fiesta”, pero es un acierto haberlo hecho, incluso con un modelo que puede democratizar la seguridad, siendo uno de los productos relativamente asequibles del catálogo.
Las novedades en este espectro son importantes, con un sistema de control de luces automáticas, monitor de punto ciego y asistencia de frenado inteligente, aunado a las seis bolsas de aire y cámara de reversa que ya se encuentran en preparaciones de menor equipo.
También por fuera existen algunas variantes que hacen a esta Carbon Edition distinta al resto de la gama, con un color negro en carrocería, mismo tono encontrado en los rines de este subcompacto japonés.
Al interior las vestiduras parecen de un segmento superior, gracias a la combinación de materiales de doble tono, así como un terminado similar a la Alcantara y algunos vivos que es expanden por toda la cabina.
Bajo el cofre no existen variantes, pues es la misma propulsión proveniente de un bloque de cuatro cilindros de 1.5 litros de aspiración natural y un sistema MHEV, suficiente para 110 caballos de fuerza y 106 lb-pie de par, combinados con una caja automática de seis velocidades.
Rendimiento excepcional
Como podemos anticipar, el conjunto mecánico no es para entusiastas, pues es más bien una agrupación de elementos que se esmera por ponderar el bajo consumo de gasolina y lo logra de manera acertada.
Sí, puede que extrañemos los desarrollos veloces y las aceleraciones más contundentes, pero desde que conocemos al Mazda 2, sabemos que no es un producto pensado en cumplir con estas expectativas.
Los despegues e incorporaciones requieren de tiempo, pero una vez superada la marca de los 70 km/h, el desarrollo se vuelve un poco más llevadero, al menos hasta el rango de los 120 km/h, aunque no más allá de ese punto.
El motor resulta un poco ruidoso, pero la caja logra un desarrollo decente de las virtudes contenidas del subcompacto, que puede ser un poco más agresivo con el selector de modo Sport en el selector de marchas.
Aunque no es para entusiastas, si es un coche para ahorradores, pues la computadora nos dio un consumo mínimo combinado de 13 km/l, algo muy bueno, sobre todo en estos tiempos de hidrocarburos costosos.
El habitáculo es cómodo, más para dos que para cuatro personas, ya que las plazas traseras tienen un espacio relativamente pequeño, principalmente para piernas y cabeza, aunque a los lados es un tanto más razonable.
Nos gustan los terminados en general, pero los años ya se le notan a este modelo, con un esquema de elementos que ya refleja cierta veteranía, además, se extrañan los puertos de carga rápida, la posible incorporación de un cargador inalámbrico e, incluso, un descansabrazos, que parece necesario para el contenido espacio.
En general, este Mazda 2 era un coche que te comprabas más por capricho que por razonamiento, pero la variante Carbon Edition te da razones para hacerla una compra racional, con más elementos de seguridad y una personalidad más jovial, aunque por ello hay que desembolsas 364mil 900 pesos mexicanos.