La Molienda, manjares con toque ahumado
El restaurante renueva y refuerza su menú, con una propuesta donde el toque de carbón tiene el dominio en sus sabores
Tras un día agotador en el trabajo, donde el estrés aprieta las sienes y las horas se alargan frente a la computadora, el cuerpo y la mente exigen descanso. El mejor bálsamo es una buena cena, y sin duda, una buena “medicina” se encuentra en La Molienda.
El restaurante (en Av. Lapizlázuli 3159), se ha vuelto un rincón referente en la escena gastronómica de la zona de Plaza del Sol. Con una terraza coqueta, así como un patio interior amplio y bien ventilado, es uno punto de encuentro culinario donde se rinde culto al horno de carbón, con sabores ahumados y picantes, así como una buena barra de bebidas, con cocteles, cervezas y licores listos para maridar con cada platillos.
Sergio Huerta, dueño de La Molienda, ha cuidado cada detalle en el restaurante (la franquicia ya supera las dos décadas de vida). Su carta está construida bajo la buena mano y experto sartén del chef Iván Guzmán. Esta sección asistió a la presentación de una selección de los platillos emblemáticos de su carta, y todos son una declaración de amor a los buenos sabores y al buen comer. ¿Comenzamos el viaje culinario?
Taquito de pastor negro:
Un clásico de la cocina “callejera” reinventado con un toque de glamour, pero no pierde ese encanto e intensidad de sabores. El restaurante reinventa este platillo banquetero al marinarlo con un recaudo negro y ceniza de cebolla, así como una tortilla de maíz azul.
Es una de las grandes sorpresas del menú, con el pastor dominando, pero bien acompañado por la ceniza de cebolla. Cada mordida nos regala una jugosa sorpresa.
Col tatemada:
Marinada con mantequilla de ajo, es una suculenta entrada. Los amantes de la col descubrirán cómo marinado potencia su sabor, sin que eso la vuelva invasiva o agobiante para el resto de los sabores.
Tanto el platillo anterior como este van bien con una cerveza tipo lager o Ipa.
Volteado de filete:
Para los amantes de la cocina norteña llega el volteado de filete, con cebolla, brotes y sobre una tortilla de maíz, este sí, del tradicional, sobre una costra de queso.
Taco bien servido, la carne del filete es suave con un toque ahumado. Va bien con una cerveza lager.
Costilla Norteña Angus al Carbón y Aguja Norteña Angus:
Regularmente se sirven separados, pero para la degustación se presentaron juntos (no es queja). Una genuina carta de amor a los cortes, la carne llega bien jugosa y pidiendo una buena mordida, es altamente “taqueable”.
Está la opción de agregarle salsa picante de la casa o unas buenas gotas de limón, pero la recomendación siempre será hincarle el diente sin ningún otro elemento previamente colocado, para poder saborear en toda su gloria el toque de carbón.
Pan de elote con helado de vainilla: Postre de indudable manufactura mexicana, es un suculento pan que sirve para cerrar de forma gloriosa la comida. El helado le brinda un toque de frescura.
¿Recomendación? Acompañarlo con una sabrosa cerveza stout o un cafecito.
Para combatir la sed
Destaca para el maridaje de platillos las botellas de Cervecería de Colima. Aquí encontrarás la tradicional Colimita (Lager), así como la Ticus (Porter) y Piedra Lisa (Session Ipa).
Dentro de la barra de cocteles destaca la Piña María y la Margarita de piña asada con tequila, ambos perfectos para refrescar toda charla y reponer el cuerpo tras una larga sesión en la oficina.
Por supuesto que no faltan los magnos licores (mezcal, tequila y ron, entre otros), así como los digestivos y una que otra sorpresa de vanguardia, como las famosas “Perlas Negras”. ¡Salud!
Reserva y disfruta
Siempre es buena reservar para asegurar tu lugar y el de tus acompañantes. Para hacerlo puedes llamar al teléfono 33 3133 5376.
En Facebook los encuentras como: www.facebook.com/lamolienda.gdl/