Amaneciendo con sed

Fue en la primavera de 1982 cuando Don Lupe abrió su puesto de tacos de barbacoa en la confluencia de las calles Argentina y Fermín Riestra, a sólo un par de cuadras, donde en 1987 enclavó finalmente su lugar: calle Argentina esquina Alemania, donde permanece desde entonces.

Bajo un gran Hule, este árbol tan característico y endémico, se encuentra un puesto de acero inoxidable muy bien atendido y organizado. Al otro costado, un Tabachín custodia una gran lona que acaba de dar sombra al área de comedor y al mismo tiempo atrapa los olores que va emanando esos tacos que toman su bronceado en la plancha.

A un costado, están otra plancha donde la cebolla en trozos va cociéndose junto con mitades de jalapeños que aportan aromas de que algo bueno sucede. Al llegar, ves una línea de personas esperando turno, todos muy formados y dispuestos a tomar asiento en alguna de sus tres mesas de seis lugares.

Aquí un ingeniero industrial pudiera hacer su maestría de tiempos y movimientos. Primero se paga y luego uno va viendo cuándo te va a tocar para acercarte al lugar que esté por quedar libre.

Aquí sólo venden tacos de barbacoa de res y consomé. La preparan de chaleco de res, que es la parte anterior de la media res y está formada por coraza y paletilla.

En las mesas, al centro tienen un salsero grande en donde encontrarás una salsa de tomatillo de picor bajo y un recipiente más pequeño con una salsita macha de lo más buena, la cual me advirtieron que era “sólo para conocedores”. Hay limones, sal y servilletas, también, al centro.

Aquí nadie está al pendiente de limpiar las mesas, ya que cada comensal, cual si fuera una cadena de comida rápida, limpia su lugar para el próximo cliente.

Llegó mi turno, la ficha 46, cuando llegue iban en la 2,2 y no tardé más de 10 minutos. A lo lejos seguía escuchándose José José con su “Nave del olvido”, yo ya tenía lugar para deleitar estos tres tacos de barbacoa ($17 c/u) y un buen consomé ($16). Los tacos los pedí dorados, que siempre han sido mis favoritos y uno blando, los decoré hasta dejarlos como centro de mesa de boda, con cebolla bien cocida y con dejos dorados y muy suavecita, unos buenos chiles jalapeños pasados en la plancha y salsa de las dos, aunque me adueñé por un momento de la macha y a cada bocado le ponía más.

Sin duda y rompiendo paradigmas propios, el taco blando se llevó la mañana, de alguna manera esa carnita limpia, llena de tiempo de cocción y con esos aromas y sabores de los chiles anchos con los que confeccionan esta carne, lo abultado y las texturas hicieron que cambiara de opinión.

El consomé clarificado, es decir; desgrasado tenía residuos de la cocción larga que tuvo la carne que fui atrapando con la cuchara, delicioso. Tacos de barbacoa El Torito, un must que debes conocer.

¡Sé feliz!

Evaluación

Comida 4.5

Lugar 4

Servicio 5

El Torito (puesto de calle)

Domicilio: Calle Argentina 761, Colonia Moderna, Guadalajara

Horario: Martes a sábado de 8:30 AM a 3:00 PM

Teléfono: 3314223810

CT

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