Esta es la peor postura para dormir
Los expertos advierten que esta posición ejerce una gran presión sobre la columna vertebral, forzándola a adoptar una curva poco natural
El sueño es fundamental para nuestra salud, y la forma en que dormimos influye directamente en nuestro bienestar. No solo importa cuánto tiempo pasamos en la cama, sino también la posición en la que descansamos. De todas las posturas, dormir boca abajo se considera una de las peores debido a sus efectos adversos en el cuerpo.
Los expertos advierten que esta posición ejerce una gran presión sobre la columna vertebral, forzándola a adoptar una curva poco natural. Esto puede causar dolores en la zona lumbar y en el cuello. Al tener que girar la cabeza para respirar, se genera tensión en los músculos del cuello, lo que puede resultar en rigidez, malestar e incluso problemas crónicos si se convierte en un hábito.
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Además, dormir boca abajo afecta la respiración. Al presionar el torso contra el colchón, se comprime el pecho, lo que dificulta el flujo de aire y la expansión adecuada de los pulmones. Esta restricción respiratoria puede perjudicar la calidad del sueño, haciendo que la persona se despierte sintiéndose incómoda o con falta de descanso.
La falta de una alineación adecuada durante el sueño puede tener consecuencias a largo plazo. Las personas que duermen regularmente boca abajo tienden a experimentar dolores en la parte baja de la espalda, ya que la postura impide que la columna mantenga su curvatura natural. Además, la tensión acumulada en el cuello puede derivar en dolores de cabeza recurrentes, mareos o incluso problemas de circulación. Por lo tanto, aunque pueda parecer cómoda al principio, esta postura afecta negativamente la estructura corporal y la salud general.
Para evitar estos problemas, el Dr. Somers, cardiólogo y director de las instalaciones para el estudio del sueño de Mayo Clinic, recomienda dormir de lado, preferiblemente del lado izquierdo. Esta postura favorece una mejor alineación de la columna vertebral y ayuda a reducir la presión sobre los discos intervertebrales, previniendo dolores de espalda. Además, tiene beneficios para la salud cardiovascular, ya que facilita el flujo sanguíneo y ayuda al corazón a bombear de manera más eficiente.
Además de cambiar de postura, se debe utilizar una almohada adecuada que mantenga el cuello alineado con la columna. Colocar una almohada entre las piernas también puede proporcionar un mejor soporte para la espalda baja. La elección de un colchón que ofrezca el soporte adecuado es fundamental para reducir molestias y mejorar la calidad del descanso.
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