Benny Ibarra será "Novecento", el pianista que nunca se bajó del barco
El actor y cantante interpreta el primer monólogo en su carrera
Un banco de piano es lo único que acompañará a Benny Ibarra sobre el escenario en “Novecento”, la historia que Giuseppe Tornatore estrenó en 1998 para cine, basada en el monólogo teatral del dramaturgo Alessandro Baricco.
“Aquí no hay una historia de amor entre un hombre y una mujer, únicamente son dos amigos, sus anécdotas y la gran novia de todo esto es la música”
“De repente entro en crisis y digo: ‘no va a salir, esto no lo voy a lograr, ¿qué estoy haciendo? ¿para qué dije que sí?’. Pero luego digo: ‘va, sí puedo’. Sé que a veces las cosas van a salir bien y a veces no, pero con el tiempo iremos capturando mejor al personaje”, expresó Benny Ibarra.
“Novecento”, dijo, será él mismo en su más íntima expresión y está listo para asumir esa responsabilidad, de tomar “al barco por los cuernos”.
El personaje principal del ex Timbiriche es el de “Max Tooney”, un trompetista de jazz que narra la historia de “Novecento”, quien fue abandonado en un barco trasatlántico del que nunca llegó a salir. Ambos personajes son encarnados por Benny Ibarra.
Recorriendo las rutas entre Europa y América, a principios del siglo XX, el joven aprendió a tocar el piano frente a millonarios, migrantes y turistas.
Relató que, teniendo 17 años, el trompetista busca trabajo en uno de los grandes barcos trasatlánticos entreguerras. Ahí dentro conoce a Novecento, un tipo al que describe como raro porque, todas las noches, el director de la banda se le acercaba para decirle que solo ejecutara las notas normales y no exagerara.
“Aquí no hay una historia de amor entre un hombre y una mujer, únicamente son dos amigos, sus anécdotas y la gran novia de todo esto es la música, lo cual está padre porque siempre he estado enamorado de ella”, resaltó.
"Novecento", bajo la dirección de Mauricio García Lozano, es el primer monólogo que desempeña el hijo de los roncaroleros Julissa y Benny Ibarra tras haber sobresalido en obras como "Jesucristo Superestrella", "Vaselina", "Hermanos de sangre" y "El hombre de La Mancha", por citar algunas.
Mencionó que lo más difícil ha sido el ejercicio mental, pues se trata de un texto largo que debió memorizar, entender e interpretar para lograr que, ya sobre el escenario, el espectador sienta lo que les está transmitiendo.
“Ya vi la película (La leyenda del pianista en el océano, también llamada La leyenda de 1900), pero de inmediato la borré porque es muy distinta. Es ciento por ciento realista, hay muchos actores y ves el piano de cola bellísimo cuando aquí hay que fabricarlo con la imaginación".
“Se ve a ‘Novecento’ tocándole a una hermosa mujer que tiene la piel transparente, las manos sin joyas y las piernas delgadas, pero todo eso, yo lo tengo que describir, no me apoyaré de nada más, por lo que tengo que lograr que el público lo crea”.
El compositor de éxitos musicales como Si puedo volverte a ver y Cielo recordó que cuando concluyó la temporada del musical El Hombre de La Mancha se sintió deprimido al pensar que ya no tendría un lugar a dónde llorar. “Pensé en dónde iba a sacar mi rabia y mis miedos. Pero eso es el teatro, eso es lo bonito de hacerlo una y otra vez”.
Bajo la producción de Ana Bracho Ahumada y Paula Sánchez Navarro, "Novecento" levantará su telón a partir del 1 de octubre en “la casa de Mariana (Garza)”, dijo el actor refiriéndose al Teatro Milán de esta ciudad.
AC