Reforma de Trump obligaría a bajar los impuestos en México
Expertos dicen que ante menores tasas en EU, el país debería revisar ISR, IVA e IEPS
La reforma fiscal del presidente Donald Trump, que pretende reducir los impuestos a empresas y personas, podría ser la excepción para que el gobierno mexicano “abra” el Acuerdo de Certidumbre Tributaria y modifique el marco tributario para hacer frente a la baja de impuestos en Estados Unidos que impactaría al país con menor inversión y empleos.
En 2014 el gobierno federal anunció que desde ese año y hasta el 30 de noviembre de 2018 no propondría cambios a la estructura tributaria excepto cuando existan “eventos macroeconómicos sustanciales ante los cuales sea imperante realizar ajustes al marco tributario”.
Expertos consultados por El Financiero consideraron que si Trump logra bajar las tasas impositivas, esto representaría un cambio muy significativo en el entorno competitivo del país, por lo que el gobierno no puede quedarse estático y debería “abrir” el Acuerdo de Certidumbre Tributaria.
Mario Correa, economista en Jefe de Scotiabank México, dijo que México tendría que adaptar su marco fiscal y probablemente su política monetaria para hacer frente al entorno de una nueva política fiscal en Estados Unidos.
“Este Acuerdo de Certidumbre dice que el gobierno no va a iniciar por iniciativa propia un cambio en impuestos pero si el mundo nos cambia, en este caso Estados Unidos, y además se trata de un cambio significativo, tendremos que adaptarnos y no sería prudente tratar de mantener las mismas condiciones cuando el mundo está cambiando”, afirmó Correa.
Indicó que aunque México tiene poco espacio en las finanzas públicas que dificultarían una nueva estructura fiscal, el país debe reaccionar y también estará obligado a reducir la tasa impositiva de las empresas y buscar fórmulas para compensar esos ingresos, como puede ser reducir el gasto público.
Manuel Rico, socio de Impuestos Corporativos en México de KPMG, dijo que la reforma fiscal en Estados Unidos “sí debería considerarse como un cambio importante que modifica el esquema económico y macroeconómico en el país y podría entrar en un proceso que, incluso con el Acuerdo de Certidumbre, por cuestiones ajenas al país se llegue a revisar”.
Añadió que si la reforma fiscal de Trump es aprobada, específicamente si se reduce la tasa corporativa de 35 a 20 por ciento, esto afectaría en México porque se ubicaría 10 puntos porcentuales por arriba de nuestro principal socio comercial.
“Lo más conveniente es revisar una reforma integral en México en ISR, IVA, impuestos especiales y deducciones inmediatas de activo fijo (...) Sabemos que será un año complicado en México por las elecciones y el TLCAN, quizá debamos esperar más allá de septiembre de 2018 pero podría ser ya un poco tarde”, .
Ernesto O’Farrill, presidente de Bursamétrica, indicó que si Trump logra una reforma tan agresiva como la que propone, México quedaría muy ‘descompetitivo’ “y no sería extraño como consecuencia recibir menor inversión extranjera directa o que algunas empresas extranjeras que operan aquí cierren y regresen a EU”.
Dijo que si el gobierno mexicano concretara una reforma fiscal para hacernos menos ‘descompetitivos’ frente a Estados Unidos el impacto sería menor, pero en un año de elecciones es difícil que el Congreso acceda a hacer una reforma fiscal. “La menor inversión traería un tipo de cambio más alto, que traería presiones inflacionarias; probablemente tasas de interés más altas (...) en conjunto podría llevar a un alza en costos y menor actividad económica”.
TASA CORPORATIVA
Bajar impuesto elevará PIB: Casa Blanca
Reducir la tasa impositiva corporativa a 20 por ciento aceleraría el crecimiento lo suficiente como para que la economía de Estados Unidos crezca entre 3 y 5 por ciento más que sin la medida, señala un análisis elaborado por la Casa Blanca.
Agrega que el recorte de impuestos corporativos elevaría el ingreso familiar promedio en al menos cuatro mil dólares. Otros economistas han cuestionado la afirmación. El documento divulgado el viernes combina los efectos de reducir la tasa corporativa, ahora de 35 por ciento, con otra propuesta para permitir que las compañías desgraven de inmediato el costo de ciertas inversiones de capital. Según la ley actual, tales inversiones se desgravan a lo largo de los años mediante depreciación.
El recorte de la tasa corporativa y una transición a la declaración “total e inmediata” de compras de equipos como costos operativos en lugar de inversión de capital reducirían el costo del capital y “generarían un anticipado aumento adicional de largo plazo en el PIB de 4.2 por ciento” sobre el pronóstico actual de la Oficina de Presupuesto del Congreso.
Por su parte, dos abogados republicanos dijeron que el plan fiscal no elevará el déficit presupuestario de EU en el largo plazo como han anticipado economistas, “pues mantendrá la economía en movimiento”