Plan Maíz por México busca asegurar el futuro
En alianza con Nesté, se busca que productores del Bajío incrementen su productividad mediante prácticas de agricultura sostenible.
En 2019, el Congreso de la Unión decretó el 29 de septiembre de cada año, como el Día Nacional del Maíz, con el propósito de rescatar el principal grano y alimento que es símbolo de México y parte de nuestra cultura. Bajo ese contexto Nestlé a través de diversas acciones, se ha comprometido a tener un abasto responsable en 12 categorías de compra, dentro de las cuales se encuentra la de cereales, como el maíz y trigo.
De acuerdo con el Grupo Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático (IPCC, por sus siglas en inglés), si nuestros hábitos de consumo y producción no transitan hacia formas sustentables, en menos de 10 años la humanidad estará frente a un momento crítico: el consecuente aumento de las necesidades alimentarias no encontrará respaldo en un mundo con tierras de cultivo reducidas y degradadas que, además, sufrirán cada vez más los efectos del cambio climático.
Por esta razón, entre los Objetivos de Desarrollo Sostenible de las Naciones Unidas destaca que, para 2030 es necesario asegurar la sostenibilidad de los sistemas de producción de alimentos y aplicar prácticas agrícolas resilientes que aumenten la productividad y la producción, contribuyan al mantenimiento de los ecosistemas, fortalezcan la capacidad de adaptación al cambio climático y mejoren progresivamente la calidad del suelo y la tierra.
Sustentabilidad y abastecimiento
En ese sentido, en 2017, se firmó un acuerdo de colaboración entre el Centro Internacional de Mejoramiento de Maíz y Trigo y Nestlé México para trabajar de la mano en Plan Maíz por México, un plan de compra nacional de maíz y trigo, para apoyar el desarrollo de agricultores, principalmente en la zona del Bajío, para que incrementen su productividad mediante prácticas de agricultura sostenible.
Plan Maíz por México está alineado con metas planteadas en los Objetivos de Desarrollo Sostenible. Lo que se busca el proyecto es promover la Agricultura Sustentable en Guanajuato desde 2018 e incide positivamente en aspectos como la seguridad alimentaria, el impacto ambiental y la inclusión social.