Industria nacional cerrará el año con saldo positivo
El presupuesto de la Concamin es concluir con 5% de crecimiento, a pesar de pandemia de covid. Las ventas por El Buen Fin y la temporada navideña alentaron la recuperación en los últimos meses
Aunque en octubre pasado se registró una caída de la manufactura mexicana, para el cierre de 2021 se espera terminar con un crecimiento anual de 5%, consideró el presidente de la Confederación de Cámaras Industriales (Concamin) José Abugaber.
Ese incremento estará ligado a que hay una sustitución de importaciones en algunas industrias a causa de la crisis global de contenedores, así como también a las ventas que se registraron tanto en El Buen Fin como las que esperan en la temporada decembrina, explicó.
La crisis de logística y la inflación en materias primas son factores que afectan en buena medida a la industria mexicana, lo que se tradujo en que en octubre se registrara una contracción de 2% en la actividad.
De no haber sido por esas circunstancias especiales, el crecimiento habría sido de hasta 8% o 10%, expuso.
“La inflación nos está pegando muy fuerte, nos ha incrementado toda la materia prima en 7%”, dijo Abugaber, pero los precios no se pueden subir en la misma proporción por la situación económica que viven las familias.
En algunos casos sólo suben 6%, a pesar de que el ajuste al alza debiera ser de 10%, pero no significa que la gente deje de consumir los productos.
En el caso de la logística, el encarecimiento del movimiento de contenedores a escala global y los retrasos para recibir insumos o bienes terminados también pueden generar oportunidades.
A esa crisis se suma la devaluación del peso frente al dólar, que por un lado puede afectar a algunos industriales, pero puede ser un aliciente para que se consuma producto nacional y se deje de importar, considera.
En industrias como la textil, de la confección y del calzado se ha dado la sustitución de importaciones, las cuales bajaron aproximadamente 8 por ciento.
Para 2022, por la situación actual de la economía y la guerra arancelaria entre Estados Unidos y China se espera una mejoría. y a pesar de que persiste la incertidumbre sobre qué pasará si hay nuevas olas de contagios por variantes de COVID-19, hay optimismo, explicó Abugaber.
MQ