Constructivas, negociaciones del TLCAN pese a aranceles: negociador mexicano
Kenneth Smith declaró que México y Canadá no consideran abandonar las pláticas por el anuncio de Estados Unidos
Las negociaciones del TLCAN continúan de forma constructiva pese al anuncio sobre la imposición de aranceles a las importaciones estadounidenses de acero y aluminio, dijo el jefe negociador mexicano, Kenneth Smith, y añadió que México y Canadá deben ser excluidos de la medida.
"Estados Unidos tiene un superávit de dos mil millones de dólares con Canadá por lo que consideramos la imposición de tarifas sobre el acero y aluminio totalmente inaceptable".
En el marco de la séptima ronda de negociaciones para la renovación del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN), que se realiza en Ciudad de México, Smith aseveró que ninguno de los socios del instrumento considera abandonar las pláticas por el anuncio de Estados Unidos.
“Estamos trabajando de manera constructiva. No está afectando (el anuncio) el funcionamiento de las mesas”.
No obstante, Kenneth Smith consideró que “a través del TLCAN y por la relación de aliados estratégicos que somos de Estados Unidos, (México y Canadá) deberíamos ser excluidos de este tipo de medidas y vamos a mantener esa posición”.
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, afirmó el jueves tras un encuentro con líderes empresariales en la Casa Blanca que firmará “la próxima semana” aranceles de 25% a las importaciones de acero y de 10% a las de aluminio de algunos países, y que estarán en vigor “por un largo periodo”.
Los aranceles al acero y aluminio serán generales y no se contempla hacer excepciones para ningún país, aunque sí podrían hacerse para ciertas “situaciones” particulares, aseguró la Casa Blanca.
El Fondo Monetario Internacional (FMI) advirtió de que los aranceles pueden “causar daños no solo fuera del país, sino también a la economía estadounidense”.
Trump minimiza riesgos
El presidente Donald Trump se declaró seguro de ganar la guerra comercial que se avizora tras su anuncio de gravar las importaciones de acero y aluminio.
“Mucho ruido y pocas nueces”, dijo el secretario de comercio Wilbur Ross en televisión mientras las bolsas caían y se escuchaban por doquier amenazas de represalias de grandes socios comerciales de Estados Unidos y advertencias de China y de organizaciones multilaterales como la OMC y el FMI.
Trump dijo que no teme una guerra comercial y que le será fácil ganarla.
“Cuando un país (Estados Unidos) está perdiendo miles de millones de dólares en comercio virtualmente con cada país con el que tiene negocios, las guerras comerciales son buenas y fáciles de ganar”, escribió en la red social Twitter.
“Cuando estamos perdiendo 100 mil millones de dólares con un país y se hace el listo, dejamos de comercializar y ganamos en grande. ¡Es fácil!”, agregó.