¿Zarpazo letal?
Miguel Herrera mandó a su equipo a esperar a Tigres y a contragolpear, pero no le salió la jugada y las Águilas ahora están contra la pared
Con solitario gol del capitán Juninho, quien de paso se fue de cambio lesionado, los Tigres de la UANL sacaron la mínima ventaja en el partido de ida de la Semifinal al derrotar 1-0 a las Águilas, en juego disputado en el Estadio Azteca que no se llenó. El América, un equipo con la pólvora mojada, luego de que en tres cotejos (dos ante Cruz Azul, ida y vuelta, y uno ante Tigres), no han conseguido hacer gol.
Ahora, los dirigidos por Miguel “Piojo” Herrera deberán ir al “Volcán” en Monterrey el próximo sábado a las 19:00 horas a buscar ganar el partido por dos goles, ya que el triunfo 1-0 le da el triunfo a Tigres por mejor posición en la tabla general. Si América gana 2-1, 3-2, 4-3, etc., estaría avanzando a la Final del Apertura 2017 gracias a la cantidad de goles de visitante. Cualquier empate o triunfo de Tigres, les da el pase al juego por el título a los del Norte.
Pocos minutos en el compromiso y pronto comenzaron las emociones, y la primera llegó al 3’ y no fue con el local, sino con los Tigres, ya que tuvieron la primera opción para abrir el marcador, luego de que Ricardo Carioca robara la pelota y la cediera al francés Gignac, quien encaró por el sector de la izquierda, entrando al área recortó hacia su pierna derecha y disparó, pero el esférico fue atajado por Agustín Marchesín que envió a tiro de esquina, dejando en claro que éste sería un duelo en donde los arqueros argentinos se apuntarían como protagonistas.
El primer lapso seguía su curso y los Tigres mantenían el dominio sobre un América que le cedió el balón, aunado a que los felinos no se lo prestaban. Fueron 20 minutos de dominio de los norteños apabullante, sin embargo el marcador no se podía mover ante las atinadas acciones de la zaga azulcrema con hombres como Carlos Vargas, Edson Álvarez y Bruno Valdez.
Por el lado americanista, poco o nada qué contar en el primer tiempo, el nuevo método de Miguel Herrera de aguantar al rival en su campo y salir a contragolpe, en esta ocasión no daba resultado para abrir el marcador, pero sí para mantener el cero en propia puerta. Oribe Peralta se notó muy desesperado teniendo que bajar a propio campo a buscar balones y a un Darwin Quintero voluntarioso, pero poco preciso en los pases.
El penalti que marcó al juego
Apenas comenzando el segundo tiempo, el silbante Óscar Macías Romo decretó penal tras una mano de Bruno Valdez (éste alegó que le había pegado en la boca), mientras que la posibilidad de anotar recayó en el brasileño Juninho, la cual no desaprovechó y ahora Tigres ya ganaba 1-0 al minuto 47.
A partir del minuto 70 el trámite del partido cambió, ya que las Águilas tomaron el mando del partido ante la obligación de reaccionar y empatar el marcador; mientras que los Tigres aguantaron el resultado, atacando en base a contragolpes y siendo peligroso con su mejor hombre, Enner Valencia, que por la banda derecha fue un dolor de cabeza para la zaga americanista.
El drama aumentaba y al minuto 83, el colombiano Matheus Uribe tuvo el gol del empate con una brillante estampa, luego de ejecutar un remate de chilena, pero para su desgracia, la esférica se fue apenas a un costado de la cabaña de Nahuel Guzmán, que poco trabajo tuvo durante los más de 90 minutos.
LA FIGURA
Enner Valencia
A pesar de no haber conseguido gol en el partido, sí fue el hombre más peligroso del conjunto de Tigres. Pidió el balón en cualquier sector del terreno de juego, corrió por ambas bandas y fue artífice en el penal que a la postre significó el gol del triunfo para los felinos. Al final salió de cambio entre aplausos por parte de la parcialidad regiomontana.