Más Warriors que nunca
Con una inspirada segunda mitad, Golden State empareja la serie que se definirá mañana en Houston
Sobre la duela de la Oracle Arena sólo existió un equipo en los segundos 24 minutos del sexto juego de la Final de la Conferencia Oeste.
Después de haber estado abajo en el marcador por 17 puntos al término del primer cuarto, y con una diferencia de 10 en contra al medio tiempo, los Warriors de Golden State avasallaron en la segunda mitad, al imponerse 64-25 en los últimos dos cuartos para sellar una victoria de 115-86 y obligar a un séptimo juego en la serie que se definirá mañana en Houston.
Klay Thompson (35) y Stephen Curry (29) se combinaron para 64 puntos de Golden State a pesar de una floja primera mitad en la que erraron más de la mitad de sus tiros de campo y la especialidad de la casa, los disparos desde el perímetro, no entraban al aro.
Sin embargo, los “Splash Brothers” lograron la mitad de los puntos de los Warriors en los últimos dos cuartos, entre ambos acertaron 59% de sus tiros y en conjunto sólo fallaron cuatro de 15 intentos desde el perímetro.
En contraparte, los Rockets en conjunto se fueron de 10-38 en la segunda mitad —una efectividad de 28%—, fallando 13 de los 17 disparos de tres que efectuaron en los últimos dos cuartos.
“No quiero regresar a casa. Trabajamos muy duro esta temporada como para regresar a casa. Y para esto jugamos, cuando estamos contra la pared demostramos de qué estamos hechos”, comentó Thompson al final del encuentro.
Tercer cuarto de ensueño
La diferencia para los Warriors se dio en el tercer cuarto. Antes de este juego y en lo que va de la Postemporada, Golden State tenía un diferencial favorable de 95 puntos en el tercer parcial entre todos sus encuentros de estos Playoffs.
Anoche, los campeones reinantes de la NBA borraron la desventaja de 10 puntos con la que llegaron al tercer cuarto y terminaron ganando el parcial por marcador de 33-16 y terminaron con una ventaja de siete enteros.
Ahora, en estos Playoffs, los Warriors tienen un diferencial de 112 puntos a favor cuando juegan el tercer cuarto de sus partidos, lo cual también fue una constante en la temporada regular, pues promediaron 30.3 puntos y ganaban el parcial por una diferencia de 18.5 enteros por cada 100 posesiones.
Lo que prometía ser una buena noche para los Rockets, que buscaban llegar por primera vez a las Finales de la NBA en 23 años, tomó un rumbo distinto.
Sin Chris Paul en la duela debido a una lesión muscular, el juego de Houston tuvo que pasar la mayor parte del tiempo por las manos de James Harden, quien terminó la noche con 32 puntos, 22 de ellos en la primera mitad.
El siguiente mejor anotador de los Rockets fue Eric Gordon, quien tomó el puesto de Paul ante su ausencia. Gordon aportó 19 enteros, sin embargo, también fue víctima del virus de la ineficacia en Houston en la segunda mitad, después de haberse ido de 4-4 en tiros de tres en los primeros dos cuartos.
El séptimo y definitivo se jugará mañana en el Target Center, casa de los Rockets.
Rareza en Finales de Conferencia
Con la victoria de los Warriors sobre los Rockets en el sexto juego de la Final del Oeste, por primera vez desde 1979 ambas Finales de Conferencia de la NBA se irán a un séptimo juego.
Los Cavaliers de Cleveland lograron igualar a tres victorias por bando la noche del viernes cuando vencieron 109-99 a los Celtics de Boston, serie que se definirá esta noche.
En esa Postemporada de hace 39 años, los Supersonics Seattle y Phoenix se fueron hasta el definitivo en el Oeste, mientras que en el Este, el pase a las Finales lo disputaron los entonces Bullets de Washington frente a los Spurs de San Antonio.
Seattle terminaría como campeón de la Liga al imponerse 4-1 en la Serie Final contra Washington.